La maquinaria comienza a estar engrasada y poco a poco va tomando forma la tercera edición de Euskaraldia, el mayor ejercicio social en favor del euskera, que se celebrará entre el 18 de noviembre y el 2 de diciembre. Esta novedosa iniciativa, que se estrenó en 2018 y se celebra cada dos años, llega en un contexto que no puede ser más propicio para que hablantes (ahobizi) y oyentes (belarriprest) se sumerjan durante quince días en esta experiencia transformadora que persigue el cambio de hábitos lingüísticos.
El llamamiento para normalizar el uso de la lengua vasca se extiende a asociaciones, entidades y a todo tipo de espacios que sirvan de "arigune", esos lugares de encuentro tan necesarios para alimentar la llama del euskera.
La puesta de largo de esta iniciativa llega en un momento favorable porque la sociedad vasca viene de un verano en el que, por fin, la interacción social ha sido posible gracias a la remisión de la pandemia. La misma normalidad que se ha instalado en las calles se quiere trasladar a la lengua vasca como herramienta de comunicación.
La iniciativa social cuenta, además, con el viento favorable del trabajo previo realizado durante la Korrika, que se celebró en primavera. Como en sus dos ediciones anteriores, Euskaraldia quiere volver a ser, de alguna manera, ese espejo que refleje la capacidad de la sociedad vasca para cambiar los hábitos lingüísticos.
Al fin y al cabo, es de lo que se trata: utilizar más el euskera, “algo que la sociedad nos está pidiendo. Este año vemos muchas ganas y motivación”, ha remarcado la viceconsejera de Política Lingüística del Gobierno Vasco, Miren Dobaran, que este martes ha participado en un desayuno informativo junto a responsables de Euskaraldia para presentar esta nueva edición que llega bajo el lema 'Hitzez ekiteko garaia' (Es el momento de tomar la palabra).
Nuevos pasos "hacia adelante"
La organización se ha propuesto “dar nuevos pasos hacia adelante” para que impregne Euskaraldia en el mayor número de ciudadanos y entidades. “Queremos ampliar la participación de la sociedad vasca en los diferentes roles, así como habilitar el mayor número espacios de uso -arigune-, que van a ser claves”, ha señalado Iker Martínez de Lagos, miembro de Euskaltzaleen Topagunea.
La empresa, el comercio o cualquier otro sector de interacción social juegan un importante papel. “Además de favorecer el uso del euskera de un modo colectivo, son eficaces para llegar a nuevos sectores de la sociedad que hasta ahora no habían participado de la experiencia”, ha precisado Martínez de Lagos.
A partir de los 16 años, cada persona elige el rol que quiere desempeñar: "La clave está en el comportamiento y no en la capacidad", han insistido durante la presentación las coordinadoras de Euskaraldia, Goiatz Urkijo y Garazai Azkue. Así, los protagonistas, a título individual, vuelven a ser belarriprest y ahobizi. En el primer caso, son todas aquellas personas que deciden cuándo y con quién emplear lo que saben de lengua vasca. No dominan el idioma, pero su chapa indica de un modo explícito que durante esas dos semanas desean que se dirijan a ellos y ellas en euskera.
Quienes adoptan el compromiso de convertirse en ahobizi, utilizarán exclusivamente la lengua vasca con todas aquellas personas que la entienden. "Cuando no sepan con certeza si sus interlocutores comprenden el idioma, sus primeras palabras siempre serán en euskera. En función de la respuesta, la conversación podrá continuar en uno u otro sentido", han matizado las coordinadoras de Euskaraldia.
Las personas interesas pueden hacer su inscripción a partir del próximo miércoles, 28 de septiembre. Como novedad en esta tercera edición, quienes hayan participado en las ediciones anteriores no tienen que volver a cumplimentar el cuestionario y recibirán "vía sms o email" las indicaciones oportunas según el rol que elijan. Se trata de una de las novedades de esta nueva edición. "Tratamos de aportar las mayores facilidades para que se anime el mayor número de personas", señalan desde la organización.
Tampoco es necesario que lo hagan las empresas y entidades que ya han participado otros años. El plazo para ellas se abrió el 16 de mayo y permanecerá abierto hasta el 31 de octubre. Para conocer todos los detalles, se puede visitar la web de la organización https://euskaraldia.eus/- y seguir las indicaciones.
La importancia de utilizar la chapa
El Euskaraldia post-pandemia se ha propuesto dar “la mayor visibilidad posible” tras la edición previa condicionada por la pandemia. "Es clave la colaboración entre todas las entidades públicas y sociales", subraya Dobaran, quien recuerda "la decisión y atrevimiento" con el que se celebró la última edición.
La situación desde entonces ha cambiado radicalmente y la organización se ha puesto en contacto con los diferentes municipios para que a través de diferentes iniciativas, como puede ser la colocación de paneles y cartelería, "hagan lo más visible posible" esta iniciativa conforme se acerque el 18 de noviembre.
La organización insisite en que “es fundamental que cada persona utilice su chapa correspondiente”, indicando que está dispuesta a hablar en euskera (ahobizi) o a que le hablen (belarriprest). "Los últimos años no han sido fáciles para la interacción social, pero todo ello ha cambiado, y diferentes investigaciones nos indican que portar esa chapa en cualquier situación cotidiana favorece el uso de la lengua", asegura Martínez de Lagos.
