El Colegio de Logopedas del País Vasco reivindicó ayer la inclusión de profesionales logopedas, debidamente titulados, en los centros de educación Infantil, Primaria y Secundaria, sean estos públicos, concertados o privados.

A través de su presidente, Antonio Clemente, señala que la prevención y valoración de los posibles problemas en la comunicación y el lenguaje de los niños y jóvenes hasta los 18 años, así como la intervención, son funciones que corresponden al logopeda; y la implementación de dichas funciones, al tratarse de alumnos, “ha de tener lugar en la escuela ordinaria, en el marco de la inclusión educativa”.

Clemente, a través de un comunicado, indicó que la acción del logopeda contribuye a mejorar las competencias lingüísticas y comunicativas de los niños, que, a su vez, están “íntimamente ligadas al rendimiento académico y a un adecuado desarrollo cognitivo del menor”. Además, agregó que esta intervención se lleva a cabo en el contexto natural en el que los niños interactúan entre ellos y con las personas habituales de su entorno, como es el aula de la escuela común, dentro del periodo escolar.