La Dirección General de Tráfico (DGT) puso ayer en marcha una nueva campaña de vigilancia para evitar distracciones, como mirar mensajes en el teléfono móvil, en la que participarán voluntarios con lesión medular que relatarán las secuelas irreversibles que puede suponer un despiste al volante.

La campaña se llevará a cabo entre ayer y el lunes que viene, según informó la DGT, que subraya que según datos del Observatorio Europeo de Seguridad Vial (ERSO) una cuarta parte de los conductores europeos reconoce, entre otras cosas, leer mensajes de texto o comprobar las redes sociales mientras conduce.

La conducción distraída o desatenta estuvo presente en el 32% de todos los accidentes con víctimas mortales registrados en el año 2021, y desde el pasado mes de marzo la Ley de Tráfico y Seguridad Vial sanciona con seis puntos conducir sujetando con la mano dispositivos de telefonía móvil.

Por eso desde ayer los agentes de la Agrupación de Tráfico vigilarán las vías interurbanas mientras la policías municipales supervisarán el ámbito urbano. A esta vigilancia hay que añadir los medios automatizados de los que dispone la DGT, con 216 cámaras instaladas en las carreteras.

Un año más, la Federación Nacional ASPAYM colabora con Tráfico en la campaña con el objetivo de concienciar con su presencia de las consecuencias y secuelas irreversibles que puede tener una pequeña distracción al volante.