"Estamos hablando del colectivo más débil de nuestro territorio histórico”. Así calificó Markel Olano, diputado general de Gipuzkoa, al grupo de 30.000-35.000 personas que están en situación o riesgo de exclusión. La repuesta del ente foral no se ha hecho esperar y ayer presentó el nuevo Plan de Inclusión Social de Gipuzkoa Elkar EKIN 2022-2026, un plan “focalizado, transversal y orientador” que busca, entre otras cosas, implicar a todo el territorio en la lucha contra las desigualdades sociales y la inclusión social. En el acto de la puesta de largo, además del citado Markel Olano, también estuvo presente Maite Peña, diputada de Políticas Sociales, y representantes de más de 50 entidades sociales y públicas de Gipuzkoa. 

Olano fue mucho más allá a la hora de escenificar cuál es la situación social de ese colectivo. “Existe un claro riesgo de cronificación”, reconoció, por lo que, en su opinión, “Gipuzkoa tiene que convertirse en una referencia para luchar contra todas las desigualdades sociales”.

Se trata de una planificación que recoge orientaciones, recomendaciones y directrices que impulsen la generación de políticas más eficientes y comprometidas con las personas desde una perspectiva más personalizada e innovadora. “A cada cual, la ayuda que necesite”, proclamó Maite Peña. “Este plan trata de ofrecer apoyo a cada persona que lo necesita en el momento en el que se encuentra para salir de una situación de exclusión social o de riesgo de padecerla. Trabajamos mucho lo que es la prevención y la coordinación para ofrecerles precisamente esa salida desde una perspectiva personalizada”, añadió la responsable de las áreas de Vivienda, Educación y Salud del Gobierno Vasco.". 

"La situación, no podemos negarlo, es dura, con una inflación desbocada, con unos costos de energía y alimentación que afectan seriamente a estos colectivos. Necesitamos reaccionar como territorio"

Markel Olano - Diputado general de Gipuzkoa

Para Markel Olano, este plan tiene “una doble mirada”, la que tiene que ver con la atención, la protección y las políticas sociales, y otra que tiene que ver con el acceso a un empleo digno. Estima, en este sentido, que es una mirada “con una mayor personalización y una mayor presencia de la comunidad, del barrio y de las personas que están alrededor de estos colectivos”. 

Exige Olano una respuesta contundente. “La situación, no podemos negarlo, es dura, con una inflación desbocada, con unos costos de energía y alimentación que afectan seriamente a estos colectivos y pensamos que ante este otoño e invierno tan preocupante que nos viene, sobre todo para las personas más vulnerables, necesitamos reaccionar como territorio y este plan nos da un instrumento para ello”, aseguró. 

El diputado general recordó que este segundo plan da continuidad al Plan de Inclusión 2016-2020 y nace en el contexto de Etorkizuna Eraikiz y la agenda de Gipuzkoa 2020-2030, que comparten el objetivo de reforzar las políticas sociales, posicionar a Gipuzkoa en la vanguardia de los cuidados y avanzar sobre cuatro pilares: la personalización, la innovación, la participación y la evaluación. Todavía en un contexto marcado por los efectos de la pandemia y ante la creciente aceptación de la necesidad de un cambio de los modelos de intervención más centrados en la personalización y la calidad de vida, “Gipuzkoa avanza con determinación en la consecución de una sociedad más inclusiva, solidaria y cohesionada”, destacó.

57 actuaciones para la inclusión

"La ventaja de contar con una planificación a cinco años vista, es que permite orientar al conjunto del territorio en el medio y largo plazo", ha señalado Maite Peña, agregando que gracias a un trabajo "muy intenso", Gipuzkoa cuenta con las herramientas necesarias para lograr una sociedad más solidaria, igualitaria e inclusiva, que elimine los factores que ponen en riesgo la integración social de las personas y que dote de los recursos y medios más idóneos para facilitar la inclusión social de las persona más vulnerables.

"Gracias a un trabajo muy intenso, Gipuzkoa cuenta con las herramientas necesarias para lograr una sociedad más solidaria, igualitaria e inclusiva"

Maite Peña - Diputada de Políticas Sociales

Para ello se marcan 20 objetivos estratégicos y 57 orientaciones, recomendaciones y directrices, entre las que destacan actuaciones de prevención de la pobreza y la exclusión, la simplificación de trámites administrativos, el impulso de programas específicos de acompañamiento, la formación, el diseño de intervenciones comunitarias, la promoción de la salud, y la participación de las personas usuarias en el diseño de las políticas de inclusión. Además, se reforzarán y reorientarán las ayudas públicas para la inclusión social, se garantizará la participación de las personas usuarias en la elección de apoyos, servicios y prestaciones, y se pondrá especial atención en las mujeres en situación de exclusión social y en las personas que presentan patologías mentales graves.