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La Escuela de Arte de Deba lucha por sobrevivir

El emblemático centro afronta un futuro incierto. Todas las opciones, incluida la del cierre, están abiertas.

La Escuela de Arte de Deba lucha por sobrevivirJabi Leon

creada en el año 1981 con el respaldo de varios de los artistas vascos de más renombre de la época (caso del recordado escultor Jorge Oteiza), el actual Centro de Enseñanzas Artesanales de Deba, conocido como la Arte Eskolade la villa costera, no tardó en convertirse en un claro referente para las personas de todo el Estado que deseaban formarse para intentar hacerse un hueco en el exigente mundo del arte.

Así, durante sus dos primeras décadas de funcionamiento, la emblemática escuela vivió un periodo de esplendor y por sus instalaciones pasaron cientos de personas que recibieron formación en disciplinas tan diversas como el grabado calcográfico, la talla (de madera y piedra), la cerámica o la fundición artística de bronce.

Sin embargo, poco a poco la actividad del centro fue decayendo hasta llegar al momento actual, en el que la Arte Eskolase encuentra con un futuro de lo más incierto.

De hecho, entre la ciudadanía debarra ya hace un tiempo que empezaron a escucharse rumores sobre el inminente cierre del equipamiento formativo, una circunstancia que desmienten las personas que están al frente del Patronato encargado de la gestión del centro.

Según ha contado a NOTICIAS DE GIPUZKOA el edil y presidente de la citada entidad, Iñigo Cambronero, “la situación de la Escuela es muy muy delicada pero a día de hoy la Junta Rectora del Patronato de la Arte Eskola todavía no ha tomado ninguna decisión acerca del futuro del centro formativo”.

Cambronero es consciente “de la rumorología que se está extendiendo por el pueblo y por las redes sociales”, pero asegura que “están abiertas todas las opciones, desde la transformación del centro hasta su cierre o su mantenimiento tal y como está”.

Lo que parece claro es que la Arte Eskola “no puede seguir funcionando como lo ha hecho hasta ahora”, toda vez que “el departamento de Educación del Gobierno Vasco ha reducido este año prácticamente a la mitad la subvención que concedía al centro -ha pasado de 90.000 a 48.000 euros- y parece ser que incluso la ayuda concedida en 2018 podría desaparecer el próximo año”.

Ante esa situación, el Ayuntamiento de Deba, que este ejercicio ha aportado una partida presupuestaria de 140.000 euros a la escuela, “se vería en la imposibilidad de asumir íntegramente el presupuesto anual de 196.460 euros que tiene el centro”.

Según el presidente del Patronato, “no sería fácil justificar esa inversión, pero no solo por la importancia de la cuantía económica sino porque el número de matriculaciones en la Arte Eskola ha descendido de manera alarmante en los últimos años y porque en la actualidad la presencia de la escuela en la vida del pueblo apenas es perceptible”.

En lo referente a las matriculaciones, este curso el ciclo formativo que se imparte en el centro “solo cuenta con once alumnos y seis profesores, cinco de ellos en plantilla y otro contratado por servicios”, un hecho que lleva a que en la escuela debarra “el ratio de inversión por alumno ascienda a los 17.000 euros, cuando la media en Educación Primaria ronda los 8.000 euros por alumno”, explica Cambronero.

debate abierto El máximo representante del Patronato de la Escuela de Arte de Deba considera que el centro “ha cumplido un ciclo”, circunstancia de la que “también son conscientes los propios profesores”. No en vano, añade, “llevamos mucho tiempo reflexionando sobre la situación de la escuela y analizando las opciones de futuro en el seno del Patronato, en el que también tiene voz el director de la Arte Eskola, Karmel Aranguena”.

En cualquier caso, Cambronero afirma que “el debate para ver cómo es posible transformar la escuela para amoldarla a los nuevos tiempos va a continuar”.

Una de las opciones que se está barajando es la de “hacer converger en el edificio que la escuela tiene en Agirretxe las especialidades que se pudieran impartir allí sin generar ruidos ni causar afecciones a los vecinos”, toda vez que el viejo edificio de Artzabal “está en mal estado y requiere de una importante intervención para poder cumplir con las condiciones de trabajo y seguridad”.

Sea como fuere, Cambronero afirma que “a la hora de tomar una decisión el Patronato de la Escuela de Arte en todo momento va a tener presente y en cuenta al profesorado”, cuya situación va a intentar resolver “con tacto y cariño”.