“Los océanos y los mares se están convirtiendo en vertederos”

donostia - El consejero de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda, Iñaki Arriola, advirtió ayer de que “los océanos y los mares se están convirtiendo en vertederos” y destacó la importancia de la “concienciación” social y las “acciones individuales” para paliar esta situación.

Arriola hizo estas declaraciones a los periodistas en Zarautz, donde participó junto con 400 estudiantes de secundaria y de formación profesional en la recogida de plásticos de pequeño tamaño diseminados por la arena. Esta actividad, en la que tomaron parte alumnos de cinco centros educativos de Zarautz, fue organizada por el Programa Aztertu e Ingurugela con motivo del Día Mundial de la Biodiversidad, informó ayer el Gobierno Vasco.

El objetivo es concienciar a la ciudadanía sobre el grave problema ambiental que supone la presencia de grandes cantidades de plásticos de todos los tamaños en el medio marino.

Por este motivo, la actividad de ayer consistió en la criba de la arena de la playa de Zarautz en busca de microplásticos -aquellos plásticos que tienen menos de cinco milímetros de diámetro- y su posterior recogida.

Las labores se desarrollaron en el límite de la pleamar, donde se suelen acumular la mayoría de los residuos que llegan a los arenales, a lo largo de 1.600 metros de la playa zarauztarra.

Arriola destacó la importancia de este tipo de acciones para concienciar sobre las “consecuencias” que tienen los “hábitos de consumo en el deterioro del medio marino”.

El Gobierno Vasco señaló que el océano se está convirtiendo en un sumidero de multitud de residuos debido a los vertidos que se hacen en alta mar pero, sobre todo, por los procedentes de los ríos y las costas.

La acción del oleaje y de las mareas los fragmenta en partículas de pequeño tamaño que sortean los sistemas de limpieza de playas, aunque también pueden encontrarse en el medio marino otros “microplásticos” producidos para su uso directo como las partículas granulares utilizadas como abrasivos en los cosméticos. - Efe