Cerca de un centenar de jóvenes participaron ayer en las aguas de la bahía donostiarra en las pruebas para convertirse en los socorristas de las playas guipuzcoanas en verano. Los participantes ocuparán los 89 puestos vacantes en los arenales de Donostia, Orio, Zumaia, Deba y Mutriku.

Los exámenes comenzaron el viernes: apnea, una secuencia de rescate y entrevista personal. Ayer se completaron con los ejercicios físicos, en los que los aspirantes a socorristas tuvieron que nadar cerca de 1.600 metros y correr casi 1.800. En concreto, salieron nadando desde el puerto hasta de la isla Santa Clara, de la isla a la playa de Ondarreta y, desde allí, corrieron superando el Pico del Loro por la playa de La Concha hasta el Náutico. Posteriormente, tuvieron que volver a meterse en el agua y llegar hasta el puerto.

Los aspirantes -hombres y mujeres- tienen que contar con las titulaciones de primeros auxilios y socorrismo acuático y estar en posesión de los cursos de Desfribilador Externo Automático (DEA). El coordinador de la Cruz Roja de las playas de Gipuzkoa, Marcelo Peruchena, destacó la dureza de las pruebas. “En general la gente viene muy preparada”, recalcó.