Acusan al edil de obras de Azkoitia de reformar su caserío sin licencia
El PNV insiste en solicitar el informe de unos trabajos “realizados sin proyecto y sin pagar tasas”
Azkoitia - El PNV de Azkoitia ha denunciado públicamente que el concejal de Obras y miembro del Gobierno municipal de Bildu, Iñaxio Gorosabel, “ha realizado obras para reformar el tejado de su caserío sin contar con los permisos correspondientes, sin el proyecto necesario y sin abonar las tasas que todo ciudadano está obligado a pagar cuando realiza obras en algún inmueble de su propiedad”.
Según explican desde la formación jeltzale, “el pasado 19 de enero el propio Iñaxio ya reconoció en la Comisión de Urbanismo, Obras y Servicios del Ayuntamiento que había realizado unos trabajos de mejora en el caserío Mokoroa sin contar con el permiso necesario, por lo que el día 31 de ese mismo mes solicitamos formalmente el correspondiente informe técnico y jurídico para que el propio Ayuntamiento nos aclarare el tema antes de las elecciones”.
Sin embargo, ante la ausencia de una respuesta del Gobierno local el PNV de Azkoitia volvió a registrar durante la jornada de ayer “tres meses después de la primera solicitud” el informe jurídico que permitiría determinar “cuáles son las responsabilidades del concejal de Bildu y cómo depurarlas”.
Desde el PNV no entienden “qué pasa para que el servicio de Secretaría del Ayuntamiento no realice el informe” relativo a las obras ejecutadas en el caserío Mokoroa que, además, “cuenta con una catalogación especial del departamento de Patrimonio del Gobierno Vasco y, en consecuencia, sus propietarios no pueden hacer lo que quieran; toda vez que para ejecutar cualquier reforma en esos inmuebles hay que cumplir con un procedimiento especial”.
Cronología de los hechos El PNV de Azkoitia explicó ayer que fueron varios vecinos del pueblo los que les comunicaron a finales del pasado año que Iñaxio Gorosabel estaba acometiendo obras de mejora en el tejado de su caserío. Según cuentan desde la formación jeltzale, “al ver que ese tema ni se había mencionado en la comisión correspondiente, empezamos a sospechar que esa reforma se estaba llevando a cabo sin la licencia oportuna, por lo que el 12 de diciembre remitimos un escrito al propio Iñaxio, a la alcaldesa, al arquitecto municipal, a la secretaria municipal y al edil responsable de Urbanismo con el fin de aclarar este tema”.
Poco después, prosiguen los jeltzales, “el propio Iñaxio reconoció que había realizado los trabajos, pero que tenía cuatro meses de plazo para realizar la solicitud de los permisos y presentar el proyecto de obras en el Ayuntamiento”.
Al ver que esa respuesta “carecía de bases a nivel jurídico y técnico”, el PNV de Azkoitia pidió asesoramiento sobre los procedimientos para la concesión de licencias que se siguen en el Consistorio: “Fue entonces cuando nos dijeron que cualquiera que tenga intención de acometer alguna reforma debe contar antes con la licencia, por lo que vimos que lo que había hecho Iñaxio estaba fuera de toda legalidad”.
Así se llegó a la citada comisión del 19 de enero, en la que el edil de Bildu “reconoció haber cambiado tejas y las maderas de la estructura sobre las que se asientan”. Además, aseguró que “esa misma mañana” había presentado el proyecto en el Consistorio, esto es, “bastante después de ejecutar las obras”.
A partir de ahí, el PNV solicitó formalmente la realización de un informe técnico-jurídico sobre las obras en el caserío Mokoroa. Además, consultó el tema con un equipo de abogados, para quienes “el hecho de que no se haya obligado a restaurar la legalidad urbanística ante una actuación clandestina, y de manera inmediata, tal y como está acreditado, pudiera constituir un delito de tráfico de influencias”. De hecho, estos asesores jurídicos aseguran que la propia alcaldesa “podría estar incurriendo en trato de favor, al pretender tapar lo evidente y no tomar la decisión de actuar en consecuencia”.
De confirmarse las irregularidades que denuncian desde el PNV, la de Iñaxio Gorosabel sería la segunda situación en la que un edil del Gobierno municipal de Azkoitia actúa de manera ilegal en la presente legislatura; toda vez que el 16 de mayo de 2013 Ibon Arrieta ya dimitió de su cargo después de haber abierto al público un bar cuando carecía de la licencia de actividad necesaria.