La Policía visiona las grabaciones para saber qué ocurrió en una pelea mortal en Barakaldo

Bilbao. Las imágenes captadas por varias cámaras de seguridad de la zona de Megapark, en Barakaldo, podrían ser claves para esclarecer los motivos por los que J.J.R.M, un baracaldés de 40 años, fue apaleado hasta acabar con su vida. Tres jóvenes de entre 20 y 22 años, dos de ellos vecinos de Bilbao y el tercero de Espinosa de los Monteros (Burgos), fueron detenidos por su presunta participación en la muerte a golpes del hombre. El suceso se registró sobre las 3.15 horas en la calle San Bartolomé, en el entorno de las torres de San Vicente, y en las cercanías de una conocida discoteca, situada en el centro comercial Megapark.

Poco ha transcendido sobre las razonas que dieron origen a este fatal suceso que conmocionó ayer a los vecinos de esta zona de Barakaldo. No obstante, la Ertzaintza ha abierto una investigación para conocer si el encuentro entre los tres jóvenes y la víctima fue fortuito o, si ya existía una relación que dio origen al violento desenlace. "Algunos dicen que el fallecido iba a la discoteca Rock Star que está justo enfrente, pero ya me extraña, teniendo en cuenta que ese es un local para gente mucho más joven. Una vecina ha dicho que podía haber ido a sacar dinero a la caja y que allí le han pillado. Seguro que le fueron a robar. La gente va muy pasada", comentaba la camarera de un bar, ubicado en la misma calle del suceso.

Los comentarios y las mil y una hipótesis corrieron como la pólvora entre los vecinos de la zona que ayer salieron a disfrutar de una soleada jornada festiva. Todos intentaban hallar una explicación a este incidente que tiñó de luto el barrio. Con el sol de la mañana saltaba la noticia. "Me he despertado y lo primero que he oído en la radio es lo del muerto. Yo vivo en frente, pero la ventana me da para el otro lado. ¡Qué horror y qué miedo! No vamos a poder ni salir de casa", comentaba una señora en la panadería del barrio. Isabel vive encima de la sucursal de la BBK, en la calle San Bartolomé, justo en frente del lugar en el que sucedió el apaleamiento. "A las cuatro de la mañana las sirenas me han despertado y me he asomado a la ventana y he visto a una persona en el suelo. No se movía... Del susto no he podido pegar ni ojo", relata, aún abrumada la mujer.

El incidente se produjo hacia las 03.15 horas. Los vecinos de la zona dieron la voz de alarma y avisaron a la Policía Local. "Un vecino, alertado por los gritos y el ruido, ha llamado a la Policía. Teniendo en cuenta que muchos jóvenes van a la discoteca y hacen botellón no es de extrañar que haya jaleo los fines de semana. Tampoco es la primera vez de una pelea o una violación", se lamentaba otro vecino, mientras paseaba con el perro. "Yo me he enterado por una vecina que le ha llamado a mi mujer para preguntarnos si conocíamos al muerto. No tenemos ni idea de quién puede ser, qué pena", añadía.

La noche fue testigo de la brutal paliza. Una patrulla se personaba rápidamente en el lugar de los hechos y comprobaba que había un hombre herido grave, tumbado en el suelo, en la misma carretera, justo al lado de unos vehículos aparcados. Según ha podido saber este periódico, cuando llegaron los agentes, el hombre respiraba con dificultad, apenas tenía pulso y sangraba de forma abundante por la nariz. La Policía avisó de inmediato a los servicios de emergencias, que se personaron en el lugar para atender al hombre, pero dada la gravedad de las heridas poco pudieron hacer por salvar su vida. "He visto a dos sanitarios como le intentaban reanimar, pero el pobre no reaccionaba. Se lo han cargado a golpes", describía Isabel, mientras que apuntaba con el dedo el lugar donde caía malherido el vecino de Barakaldo.

Descripción de los vecinos La detención de los tres jóvenes fue rápida. Mientras que J.J.R.M. se debatía entre la vida y la muerte, tendido en el suelo, los agentes que integran el dispositivo especial desplegado las noches de los fines de semana en la zonas de la conocida discoteca fueron informados que los sospechosos habían huido a la galería cubierta del centro comercial. La colaboración de los vecinos y de los testigos de la agresión ayudó a localizar a los tres jóvenes que huyeron a pie tras golpear al hombre. En cuestión de minutos los agentes, con la ayuda de los guardas de seguridad del recinto, procedían a la detención de dos de los sospechosos, A.S.C., de 22 años y domiciliado en Bilbao, y a E.A.B., de 20 años, vecino de la localidad burgalesa de Espinosa de los Monteros.

Durante la detención se vivieron momentos de tensión, incluso, uno de los detenidos propinó insultos y amenazas contra algunos agentes. Posteriormente, en el interior de la discoteca, los policías arrestaban al tercer sospecho, E.S.L., de 22 años y vecinos de Bilbao.

Además de las reacciones de los vecinos de la zona de San Vicente, el triste suceso generó las reflexiones de los representantes políticos del Ayuntamiento de Barakaldo. El alcalde, Tontxu Rodríguez, y la concejala de Seguridad Ciudadana, Olga Santamaría, manifestaron -en un comunicado- "su condena más enérgica" por "este asesinato" y transmitieron sus condolencias a la familia del fallecido.

"Que el peso de la ley recaiga sobre los responsables de esta salvajada y se haga justicia". La concejala del PNV en Barakaldo, Amaia del Campo, a través de las redes sociales mandaba también "un fuerte abrazo a la familia del vecino" de Barakaldo asesinado. "Me parece imposible entender que alguien pueda acabar con la vida de un ser humano", escribía.

La víctima permaneció una hora con vida hasta que, finalmente, y dada la gravedad de los golpes, fallecía sobre las 4.15 horas. A las 5.40 horas, el juez de guardia procedió al levantamiento del cadáver.

Los tres jóvenes -dos de ellos cuentan con antecedentes policiales- permanecen detenidos en dependencias de la Ertzaintza por su presunta implicación en un delito de homicidio. La Policía vasca intenta hallar las piezas del puzle para esclarecer cómo se produjeron los hechos.