pamplona/tafalla. El menor introdujo la cabeza entre unos barrotes que conforman el perímetro del patio y quedó inconsciente, por lo que tuvo que ser hospitalizado en estado muy grave. La Policía Foral ha abierto una investigación sobre lo ocurrido.
Los hechos sucedieron pasadas las 11.30 horas en el centro educativo, de titularidad municipal, situado en la calle Olleta. Al parecer, el niño se subió en una caja que había en el patio e introdujo su cabeza entre los tubos cilíndricos, en una zona que sirve de separación de la zona infantil de una salida de emergencia.
Según la llamada de aviso a SOS Navarra, el niño había sido encontrado inconsciente por el propio personal del centro que, tras desatraparlo rápidamente, dio la alerta a los servicios de emergencias. Hasta el lugar se desplazaron bomberos del parque de Tafalla, patrullas de Policía Foral y un equipo médico del centro de salud, integrado por dos pediatras, que le practicó maniobras de reanimación cardiopulmonar básicas y avanzadas.
A continuación, el niño fue trasladado en una ambulancia medicalizada a Urgencias de Pediatría del Complejo Hospitalario de Navarra, donde quedó ingresado en situación clínica muy grave.A medianoche se informó del fallecimiento del pequeño.
Los padres del niño se encontraban ayer de viaje en Gijón, por lo que, nada más conocer la noticia a través de una llamada telefónica, emprendieron la vuelta a Navarra, indicaron fuentes próximas. Por su parte, la directora de la Escuela Infantil de Tafalla, que se desplazó a Pamplona en primera instancia para seguir la evolución del menor, declinó realizar declaraciones.
Los barrotes en los que se produjo el suceso sirven de separación de la zona de juegos con una salida de emergencia. Precisamente para evitar accidentes como el ocurrido ayer, a lo largo del propio perímetro de tubos cilíndricos hay instalados unos tablones de un metro de altura, aproximadamente, que quedan por encima de la propia altura de los niños que acuden a la escuela.
Padres que llevan a sus hijos a este centro reconocían ayer que el peligro no había sido previsto en ninguna de las visitas que se giran a las instalaciones. La variable con la que no se había contado es que un niño subido en una caja, como parece que ocurrió ayer, podía sobrepasar los tablones y acabar sufriendo un accidente de este tipo.