Donostia. Los trabajadores del servicio de SOS Deiak de Gipuzkoa se reunirán la próxima semana con la Delegación de Trabajo y la empresa Xupera XXI, subcontratada por el Gobierno Vasco, para concretar cuándo va a tener lugar el traslado del servicio de llamadas de emergencia a Bizkaia. "Desconocemos la fecha en la que se va a producir el traslado. Tenemos una orientativa que nos comunicaron a mediados de enero y que se supone que iba a producirse para mediados de marzo, pero esta es una de las cosas que queremos concretar la semana que viene. Queremos que se nos especifique cómo es la efectividad de este traslado y cuáles son las fechas", confirmó ayer Ana García, delegada de personal de los empleados guipuzcoanos de SOS Deiak, en el transcurso de la segunda jornada de paro que los trabajadores de este colectivo han llevado a cabo desde que se conociera el deseo del Ejecutivo vasco de unificar el servicio de llamadas de emergencia en Bizkaia.

"Nos encontramos en un punto en el que estamos paralizados. El Gobierno Vasco, por un lado, mantiene sus planes de unificar ya los servicios de llamadas de SOS Deiak, pero, en teoría, hay una resolución de la Delegación de Trabajo de paralizar este traslado en tres meses para estudiar la situación creada y entendemos que esto debería prevalecer", denunció García.

Horas La portavoz indicó, asimismo, que los 18 empleados que actualmente trabajan en la delegación de SOS Deiak en Gipuzkoa viven una situación de "tremenda incertidumbre" porque "no sabemos qué va a pasar con nuestro trabajo". De esta forma, denunció el oscurantismo de la empresa Xupera XXI, a quien acusan de no haber informado a sus empleados. "La empresa está actuando con bastante poca transparencia. Nos dieron una comunicación extraoficial el 19 de enero de que para mediados de marzo querían unificar los servicios, pero todavía no se nos ha comunicado oficialmente cuándo se va a producir ese traslado", denunció.

En esta línea, la delegada de ELA Edurne Iriondo lamentó que "nos hemos enterado a través del Boletín Oficial que el Gobierno Vasco ha sacado el servicio a concurso público, que se prevé que esa adjudicación se vaya a hacer para el 30 de marzo y en los pliegos faltan 22.240 horas al año". Y es que, según la delegada sindical, "la unificación de los servicios supondría para cada empleado trabajar 600 horas más al año, al mismo tiempo que nos enteramos de que el servicio unificado sale a concurso público con 22.000 horas menos, por lo que la unificación, más allá de los costes de traslado que va a acarrear, podría dejar en la calle a catorce o quince trabajadores".

Son precisamente los despidos lo que este colectivo quiere evitar a toda costa, ya que aseveran que los recortes van a repercutir negativamente en el servicio que se va a prestar a la ciudadanía. "Al final, se confirma lo que temíamos, que detrás de todo esto lo que se esconden son despidos encubiertos, no sabemos de qué manera pero despidos. Si la reducción afecta al 25% de las horas, entendemos que de las 60 personas que actualmente trabajamos en las tres delegaciones de SOS Deiak en Euskadi, quince podrían irse a la calle", apuntó García.

"Nos parece terrible y escandaloso que el Gobierno Vasco apueste por recortar un servicio que ellos mismos han definido como esencial, de carácter público e inaplazable necesidad", calificó Iriondo a la vez que recordó que "se trata de un servicio subcontratado, que los trabajadores tienen un convenio que está parado desde 2009, que están cobrando apenas 1.000 euros en doce mensualidades trabajando 1.800 horas al año, y que el Gobierno Vasco se ponga a hacer recortes en este contexto, en un servicio de emergencia, es inaceptable".

"La ciudadanía nos transmite su preocupación ya que no entienden que en un tema como el de emergencias se lleven a cabo recortes. Los recortes tendrían que afectar a otro tipo de servicios", añadió García.

Influencia en el servicio A mediados del pasado mes de enero el Gobierno Vasco hizo pública su intención de unificar los servicios de llamadas de emergencia de SOS Deiak en Bizkaia. Desde entonces los trabajadores de la delegación de Gipuzkoa vienen denunciando que esta medida no haría sino perjudicar el servicio que se viene ofreciendo a los ciudadanos. "Ahora, trabajamos conjuntamente con la Ertzaintza y con personal sanitario. Sustituir eso por una centralita virtual que ni siquiera se encuentre en nuestro territorio va a hacer que el servicio se ralentice mucho", volvió a lamentar Iriondo.

"En Bizkaia alguien va a tener que coger la llamada, localizar el lugar, transmitirlo a través del ordenador, que llegue aquí y que los compañeros que están trabajando aquí se cercioren de que esto es así y salgan. Se trata de un trabajo que tarda minutos, unos minutos que en algunos casos pueden ser decisivos", recordó García. "La gente que utiliza el servicio, llama muy nerviosa y muchas veces lo que te da son referencias, no el lugar en dónde está. En Bizkaia, por ejemplo, no van a saber cuál es la calle de la mierda (Cipriano Larrañaga) en Irun", ejemplificó García.

Por ello, este colectivo tacha de "error" la decisión de unificar en un solo territorio el servicio.