Mantener una alimentación equilibrada durante el embarazo es fundamental para la salud de la madre y el correcto desarrollo del feto. Comer entre horas permite mantener niveles estables de energía y glucosa, prevenir la hipoglucemia y asegurar un aporte continuo de nutrientes esenciales durante el día. No obstante, la elección de los alimentos debe ser la adecuada, ¡no cualquier cosa vale! Entre las opciones ideales para picar en la gestación destacan los siguientes:
El yogur natural con frutas frescas
El primero es una excelente fuente de proteínas de alta calidad, calcio y probióticos, que favorecen la salud ósea y digestiva. Al combinarlo con frutas como fresas, arándanos o plátano, se potencia el aporte de vitamina C, antioxidantes y fibra.
Brochetas variadas
Con un poco de imaginación puedes tener en la nevera preparadas distintos tipos de brochetas combinando hortalizas, frutas y embutidos. Por ejemplo: un tomate cherry, un taquito de queso feta o mozzarela, otro tomate y un taquito de jamón york, insértalos en la brocheta, alíñala con aceite de oliva y orégano y verás cómo te apetece cuando la mires.
Los frutos secos y las semillas
Los frutos secos son muy ricos en grasas saludables, proteínas fibra, omega-3 y minerales como el magnesio y la vitamina E; lo que contribuye a la salud cardiovascular y al buen funcionamiento cerebral, aspectos muy importantes a tener en cuenta en el embarazo.
Verduritas en tiras
Ideales para ese momento de ver la tele y picotear algo. Ten preparadas tiras de zanahoria, apio, pepino…y tómalas mojándolas en alguna salsa suave de queso o yogur, será como los nachos mexicanos, pero con menos calorías.
El hummus con ‘crudités’
Los palitos de zanahoria, pepino y apio acompañados de esta crema de garbanzos con sésamo, son una combinación estupenda para ayudar a regular el tránsito intestinal estabilizar los niveles de azúcar en sangre y prolongar la sensación de saciedad.
Mini sándwiches vegetales
Si apetece algo más contundente ten hechos algunos sándwiches con pan de molde integral. Puedes poner, por ejemplo, pechuga de pollo o pavo con lechuga y/o tomate. Para controlarte mejor divide el sándwich en cuatro triángulos y así comerás sólo uno o dos.
El queso fresco o requesón con pan integral
Juntos proporcionan proteínas y calcio, vitales para la formación de huesos y dientes tanto en la madre como en el bebé, así como carbohidratos complejos y fibra, que garantizan una liberación sostenida de energía y contribuyen a mantener niveles estables de glucosa.