Mito o realidad: ¿Es bueno el gin tonic para bajar la comida?
Mucha gente defiende que este combinado tiene propiedades digestivas
Durante años, el gin tonic ha sido uno de los combinados más populares, no solo en bares y terrazas, sino también como supuesta ayuda digestiva después de una comida copiosa. Sin embargo, la idea de que este cubata beneficia al sistema digestivo es más mito que realidad.
El origen de esta creencia se remonta a los componentes de la ginebra, entre los que destaca el enebro, tradicionalmente vinculado a propiedades digestivas y diuréticas.
En su forma natural, algunas infusiones de enebro podrían, en efecto, tener efectos positivos sobre el sistema digestivo. Pero cuando hablamos de un gin tonic, la situación cambia drásticamente.
Este combinado contiene una proporción significativa de alcohol, que en lugar de favorecer la digestión, puede interferir en ella. El alcohol relaja el esfínter esofágico inferior, lo que facilita el reflujo gástrico, y ralentiza el vaciado del estómago, provocando sensación de pesadez. Además, la tónica contiene azúcar o edulcorantes, así como gas, lo que puede incrementar la hinchazón abdominal y la producción de gases.
Desmontando el bulo
Jesús y Martina Vázquez (@nutri.vazquez), expertos en medicina y nutrición, han compartido un vídeo en su canal de Instagram para desmontar el mito del "digestivo" después de comer: "No ayuda a tu sistema digestivo… y sí a inflamarte. Un gin tonic equivale a comer siete terrones de azúcar".
Consecuencias negativas para la salud
Beber un gin tonic tras una comida no estimula la digestión, sino que puede empeorar la sensación de plenitud o malestar. A corto plazo, puede ofrecer una sensación de alivio o bienestar debido al efecto del alcohol, pero fisiológicamente no hay beneficios digestivos reales. De hecho, su consumo habitual o excesivo puede tener consecuencias negativas para la salud gastrointestinal, hepática y metabólica.
Por otro lado, es importante distinguir entre la ginebra en sí y el combinado. Si bien ciertos licores digestivos (como el amaro italiano o el licor de hierbas) pueden contener ingredientes con propiedades digestivas, el gin tonic como tal no se ha diseñado con este propósito ni existe evidencia científica que respalde su eficacia como digestivo.
Dificulta la digestión e inflama
En resumen, aunque resulte tentador justificar un gin tonic tras una comida bajo la idea de "me ayudará a digerir", lo cierto es que este hábito puede tener el efecto contrario: dificultar la digestión y contribuir a la inflamación abdominal. Si lo disfrutas, que sea por placer y con moderación, pero no te engañes pensando que estás haciendo un favor a tu estómago. Para favorecer una buena digestión, nada mejor que una caminata ligera y una alimentación equilibrada.