Hondarribia - Más de un aficionado al remo se tuvo que pellizcar ayer al finalizar la regata de Hondarribia. La escena les resultaba familiar. En ella aparecía Cabo da Cruz ondeando la bandera en plena bahía de Txingudi. Los barbanzanos viajaron ayer en la máquina del tiempo para retroceder 14 años y llevarse su segunda victoria de la historia en la máxima categoría de traineras. La victoria fue un calco de la obtenida aquel 24 de julio del 2004; como entonces, el técnico Benigno Silva preparaba al bote boirense y Cabo no era favorita para llevarse la victoria. De hecho, los bermellones acabaron en sexta posición en aquella campaña, el mismo puesto ostentan ahora en la clasificación general.

Esta vez tampoco fue una victoria cómoda. Si el primer triunfo llegó con segundo y medio de ventaja sobre Astillero, esta vez fue más apretada aún. A Cabo le bastó completar su regata doce centésimas más rápido que Urdaibai. Lejos quedaron los demás rivales; los anfitriones de Hondarribia fueron los terceros en meta a trece segundos.

Si bien el viento fue en aumento a medida que avanzó la mañana, los gallegos dieron un auténtico recital que ya auguraba su gran resultado. Desde la primera palada se pusieron como proa de regata, un puesto que no soltaron en ningún momento de su serie. Arrancaron fuertes, y para las primeras paladas aventajaban a sus rivales en no menos de tres segundos.

Así, los boirenses realizaron la primera maniobra con cinco, seis y diez segundos de ventaja sobre Santur-tzi, Ondarroa y San Pedro, respectivamente. Cabe destacar el debut de Erik Expósito, hijo del exremero y expresidente del club José Antonio Expósito, quien también cuenta con muchas horas de trabajo federativo.

Las ventajas de la ciaboga resultaron anecdóticas en los siguientes minutos. La tripulación que presentó Silva fue mejorando sus prestaciones según avanzó la regata, mostrándose especialmente fuertes en popare. Tanto, que las distancias aumentaron antes de llegar a la segunda ciaboga. En el viraje, el bote rojo aventajaba en 21 segundos a Santurtzi, en 23 a Ondarroa y en 26 a la Libia sanpedrotarra. Para entonces, tanto las tribunas de aficionados como las de periodistas y delegados se apresuraban a tomar en cuenta los tiempos de los líderes de tanda.

El tercer largo no fue más que la prolongación del anterior. Cabo siguió navegando a las mil maravillas para volver a aumentar su ventaja. Santurtzi, lejos ya, perdía 28 en la última maniobra de la mañana, mientras que San Pedro alcanzó a Ondarroa gracias a su reacción. Ambas embarcaciones maniobraron a 39 segundos de los gallegos.

Sin embargo, el golpe letal llegó en el largo final. Fue ahí cuando Cabo ganó su bandera. De la manera que hizo en el segundo largo, los patroneados por Alfonso Díaz acertaron a la vuelta para terminar aumentando las distancias. Unos registros que nadie pudo mejorar en el día de ayer. Así, el cuadro boirense arribó a meta con 41 segundos de ventaja. San Pedro, por su parte, maquilló su resultado y se coló por delante de un Ondarroa que ayer no tuvo su día.

La jornada de los ondarreses ya comenzó con mal pie. El remero de espalda babor Iñaki Elorrieta tuvo que ser sustituido a escasos minutos del inicio por una lesión de espalda. El remero elantxobearra se retorcía de dolor mientras esperaba la llegada de Xabier Azkarate, que entró por él. La entrada del canterano ondarroarra significó una sanción de tres segundos tal y como estipula el reglamento; el castigo a punto estuvo de relegar a la Antiguako Ama a la undécima posición.

La tripulación que revivió la historia para los vencedores la compusieron Diego Suárez, David Fernández, Daniel González, Sergio Enrique Rodríguez, Juan Antonio Serradilla y Marco Antonio Silva por babor; Luis Manuel González, Anxo Martínez, José Ángel García, Ismael Romero, Sergio Pérez y Benigno Lojo por estribor. Alfonso Díaz guió a los boirenses mientras que Iago Dávila hizo las veces de proel.

Urdaibai aprieta Si bien Cabo completó una excelente regata que les sirvió para ganar, la celebración tuvo que esperar debido al regatón que culminó Urdaibai. Los bermeanos sabían que a además del creciente viento tendrían que enfrentarse al buen registro de los gallegos. No obstante, el equipo de Joseba Fernández recogió el guante y puso toda la carne en el asador, hasta el punto de hacer trabajar al vídeo finish.

Como en la víspera, la Bou Bizkaia optó por salir en tromba a por la victoria. Solo Hondarribia fue capaz de sujetar a los de Joseba Fernández, y lo hizo en el primer largo. Un segundo separaba a los dos mejores del verano en la maniobra, pero fue un espejismo para sus aficionados, que soñaban con la victoria local. Tras ellos llegaban Zierbena, a seis, y Orio, a ocho. Sin embargo, ninguno de los cuatro gallos fue capaz de mejorar los tiempos de Cabo.

En el segundo largo, con el viento de popa, Urdaibai consiguió acercarse a los registros de Cabo. Un segundo separaba a los dos. Más atrás se veía Hondarribia, que se dejó seis segundos a favor de los azulones. Con Zierbena a diez, Orio perdía 20 y veía como equipos como Donostiarra mejoraba sus registros y Santurtzi y Kaiku los igualaban.

En el tercer largo el viento hizo mella en la marcha de Urdaibai, que cedió otros dos segundos en el penúltimo largo en su lucha virtual con la tanda anterior. Hondarribia era segunda en la serie a diez, y Zierbena y Orio cerraban la tanda quince y 25 segundos, respectivamente.

Con tres segundos de desventaja, Urdaibai se exprimió para llevarse la bandera. Sabía que si superaba a Cabo, lograría alejar aún más a Hondarribia en la clasificación general. El esfuerzo, no obstante, resultó baldío. Se exhibió, y apretó, sufrió y puso contra las cuerdas a los boirenses, pero la victoria, al final, voló hacia tierras gallegas por doce centésimas. Da la casualidad que en todas las regatas de ayer las traineras que bogaron por la calle tres ganaron su tanda.

Donostiarra, quinto Otro equipo que acabó la jornada dominical con buen sabor de boca fue Donostiarra. El bote donostiarra se lució en una primera tanda a la que se vio relegada por su discreto puesto del sábado. Acabaron quintos en la clasificación tras mostrarse superior a sus rivales durante toda la serie.

Fue proa de regata en todo momento; sus rivales, en cambio, sufrieron diversas variaciones a lo largo de la disputa. Es el caso de San Juan. Tras ir en segunda posición durante algunos minutos, a partir del segundo largo pasó a la tercera posición. Después le tocó cerrar la tanda al verse superado por Tirán. Con el resultado de ayer los de Moaña se acercan a dos puntos de los pasaitarras, e incluso en algunos momentos de la regata virtual presagiaban un cambio en la clasificación general. No sucedió, y San Juan sigue evitando la plaza del descenso directo.