La carta de despedida de Martin Zubimendi de la Real
Como guipuzcoano y donostiarra, desde pequeño soñaba con jugar en Anoeta vestido de txuri-urdin, incluso he superado todas mis expectativas.
Hoy se me hace difícil encontrar las palabras para despedirme, no ha sido fácil, pero ha llegado el momento de separar nuestros camios y afrontar el reto de vivir una experiencia lejos de casa.
Después de 14 años en este club y conocer la Real desde dentro, estoy aún más orgulloso de haber formado parte de ella.
Esta temporada no hemos cumplido todos los objetivos que nos habíamos marcado, pero eso no empaña todos los momentos increíbles que he pasado aquí, en mi casa, donde he logrado un sueño tras otro: una Copa del Rey, cinco clasificaciones europeas, maravillosas noches de Champions... pero lo más importante ha sido el camino.
Me quedo con todas las relaciones y experiencias que he vivido en Zubieta, ese día a día que tanto he disfrutado y donde tan feliz he sido.
Quiero agradecer todo lo que hacen por este club y lo que han hecho por mí todos los técnicos de Zubieta y en especial, Imanol, por su confianza y por los valores de trabajo que me ha transmitido y que ya son parte de mí.
Ocho años dan para mucho.
Gracias al presidente, Jokin (Aperribay), por hacer historia, por confiar en mí y por hacerme sentir importante en este proyecto que tantas alegrías nos ha dado.
Tanto él, como Roberto (Olabe) y ahora Erik (Bretos) han llevado a la Real a otra dimensión.
Me voy tranquilo porque sé que la Real está en manos de personas que aman el club.
Gracias a cada uno de los compañeros con los que he compartido vestuario en este tiempo y a los trabajadores y trabajadoras que nos acompañan en el día a día.
Sois muchos los que considero amigos.
Y por último, lo más importante. Eskerrik asko denagatik zaletuei, zuek gabe honek ez luke zentzurik izango. Mila esker Anoetan zein Donostiako kaleetan jaso dudan babes eta maitasunarengatik.
Me siento orgulloso de ser txuri-urdin y nunca dejaré de serlo.