Iosu Rivas era un hombre feliz al término del encuentro: “Tenía que ser así, sufrido. No sé si es a la heroica pero tenía que ser de esta manera porque este equipo consigue las cosas así: con calidad pero apretando los dientes”.

El técnico reconocía que habían cometido errores: “El partido lo empezamos bien, haciendo las cosas bien, moviendo balón, llevándoles de un lado a otro y buscándoles los lados contrarios. Y de repente hemos dejado de hacerlo, nos hemos empezado a equivocar un poquito, ellos crecieron, encontraron el gol, un buen tanto, y el segundo tiempo creo que su plan era ése: 0-1 descanso, 0-2 y tener 30 minutos más. Les ha salido bien pero ha salido el gen del Sanse y en una jugada de gente fresca arriba, provocamos el penalti y a aguantar”.

Fortaleza

Lo que más destaca del exitoso plantel es su fuerza: “Me quedo con la fuerza de este grupo. Desde el inicio, la fuerza que se han dado desde dentro, los mensajes que se han dado entre ellos… Podía sonar increíble pero pensaban en playoff y llegaron al play-off. Y una vez de que llegas ya no nos iba a quitar nadie la ilusión de poder ascender. Me quedo con la fuerza y la creencia que tenían”.

Rivas se quitó mérito por su gesta: “Yo cuando pasa lo que pasa es ir día a día, intentando no perder el tiempo pensando en cosas que me puedan distraer, porque este grupo no se merecía que yo no pusiera todo de mi parte y mantuviera lo que estábamos haciendo bien”.

Responsabilidad compartida: "Lo que no cabe duda es que ya son historia viva de la Real: “En caliente te digo que no lo sé, pero un éxito, es algo histórico que pase aquí, en Zubieta. Jugamos para competir, competimos para ganar y todo es positivo. Que todas las cosas que pasen sean de este estilo”.

La gloria es de Zubieta: “Todos estos chavales vienen muchísimos desde abajo, nos acordamos de Gorabide, de todo el trabajo que se hace, de todos los técnicos de la casa, de Luki, luego aquí Roberto, Erik, el presi… lo que creen en Zubieta. Es una pasada estar donde estamos”.

Sergio Francisco

Rivas no se olvidó de Sergio Francisco: “Me acuerdo todos los días, he ido a sacarlo rápido. Sergio es la cabeza del equipo, estos son el alma y él es la cabeza. Lo que ha hecho ha sido una pasada desde el primer día, él también ha creído y vamos a ver cómo terminamos el día”.

La prórroga fue el momento más tenso, con un cambio pendiente: “Había que decidir. Nos quedaba un cambio y pensar en quién no estaba para seguir, valorar si necesitábamos gol o necesitábamos defender. Hemos metido y hemos decidido cerrar todo. Lo que hemos hecho previo ha sido parecido al día del Mérida, juntarnos, aquel día fue con uno menos y hoy uno más pero mismo objetivo”.

Lo más bonito de la noche ver cómo celebraban la gesta los jugadores con sus amigos del pueblo: “Aquí sale lo que son cada uno, la cercanía, lo normales que son y que ninguno tiene pájaros en al cabeza. Merecido, se lo han ganado”

Ahora sube al primer equipo como segundo de Sergio. Todo un nuevo reto: “Con muchísima ilusión pero creo que voy a empezar a pensarlo mañana o pasado. Es algo con lo que sueñas o igual ni eso porque cuando empiezas tanto jugando como entrenando es un sueño pero lo ves muy difícil, pero estamos en el mejor sitio para que pasen estas cosas”