Fin al primer culebrón del verano: la Real ha anunciado a las 11:00 horas de este sábado que ha alcanzado un acuerdo con el Atlético de Madrid para traspasar a Robin Le Normand. Como han convertido en algo habitual los clubes de fútbol, no se ofrecen cifras del fichaje, existen discrepancias al respecto: en algo más de 30 millones de euros más cinco en variables, tal y como confirman a NOTICIAS DE GIPUZKOA desde Madrid, mientras que el club realista asegura que son 34,5 millones y otros cinco en variables. De esta manera, el de Le Normand es el sexto traspaso más caro de la historia de la Real y puede convertirse en el tercero.

El club realista explica que "el acuerdo se formalizará en los próximos días, cuando el jugador regrese de las vacaciones que está disfrutando tras proclamarse campeón de la Eurocopa con la selección española el pasado 14 de julio"

Concluye así el primer serial del mercato estival realista con un jugador que apuntaba a su salida desde antes de ir a la Eurocopa. Como ya informó NOTICIAS DE GIPUZKOA hace mes y medio, el traspaso del futbolista bretón dirección Metropolitano resultaba casi inevitable. Tanto es que el culebrón que se ha querido transmitir no habría sido para tanto, como explica la línea directa entre ambos presidentes, Jokin Aperribay y Miguel Ángel Gil Marín.

Días más tarde, en plena concentración con la selección española, Le Normand fue uno de los futbolistas que tuvo que enfrentar preguntas constantes sobre su futuro personal. En una entrevista con Radio Marca, defendió la figura de Imanol Alguacil y la importancia en su trayectoria, un mensaje que dejaba cierto aire de despedida.

"Es una persona que siempre va a ser muy especial para mí. Las horas de vídeo que me he comido con Imanol, las broncas que me he comido, pero también el cariño que me ha dado y que me sigue dando...", señaló Le Normand, que aseguró que "siempre tendré palabras de agradecimiento para esa persona y ese entrenador, que es alguien muy especial para mí”.

Traspaso cuestionado

El traspaso de Robin Le Normand al Atlético ha generado discrepancia en la afición realista. Por un lado, por su destino y las razones históricas de sobra conocidas; y por otro lado, por el precio final —unos 30 millones según se dice en Madrid, 34,5 en Anoeta—, que muchos seguidores realistas consideran muy insuficiente a tenor de que es el mejor central, titular en la selección española recién proclamada campeona de Europa: casi a la mitad de su cláusula de rescisión, de 60 millones de euros.

El hecho de que ya antes del campeonato continental la salida de Le Normand pareciera más que un hecho ya era indicador de que el precio final podía quedarse por debajo de las expectativas de la masa social realista. Parte de ella confiaba en una mejor venta en el caso de que el bretón firmara una buena Eurocopa, como al final así fue.

Con estos 30 millones, Le Normand se convierte en el defensa más caro del Atlético de Madrid, al superar los 25 millones que pagó el conjunto colchonero por Mario Hermoso, aunque no se alcanzarían los 40 kilos que hubiera querido ingresar la Real.

Ocho años como realista

Robin Le Normand (11 de noviembre de 1996) llegó desde Brest con 20 años. Un fichaje para el Sanse de Imanol, que fue el gran artífice de su crecimiento, aunque en los primeros partidos con el filial el central tuvo que sufrir. Incluso fue sustituido al descanso en uno de ellos.

Asentado en el Sanse en la siguiente temporada, debutó con el primer equipo en la 18/19 con Asier Garitano como entrenador. La apuesta del club por él llegó con la salida de Héctor Moreno: no hubo fichaje para sustituir al mexicano.

Después de completar seis años en el primer equipo como pieza clave en el eje de la zaga, con una Copa del Rey y clasificación europea en cinco temporadas consecutivas, Le Normand hace las maletas rumbo a Madrid.