Dos exjugadores de la Real Sociedad frente a frente. David Silva fue el invitado de honor de Miguel Ángel Moya en el apartado de entrevistas que realiza en el programa El tercer tiempo de Movistar. El mediapunta, que se tuvo que retirar el pasado verano al romperse el ligamento cruzado anterior de la rodilla de su pierna izquierda cuando tenía un año firmado con la Real que perdonó, hizo un repaso de su carrera deportiva

Homenajes

El exfutbolista canario habló de los homenajes que está recibiendo, entre otros el tributado por la Real en Anoeta en el partido celebrado ante el Real Madrid el 26 de abril: “Es muy bonito, porque he tenido la mala suerte de no poder despedirme en el campo por el covid en Mánchester después de diez años y de la Real por la lesión. Pero estoy contento, significa que donde he estado me han tratado bien, me ha ido bien y poder vivir esto con la familia… Estoy muy agradecido”.

David Silva homenajeado en Anoeta Ruben Plaza

El mediapunta se refirió a su formación en otro equipo guipuzcoano, el Eibar: “Se hizo todo muy al final. Yo tenía una posibilidad de ir al Parma, pero se cayó. Económicamente estaban muy mal.

Crecimiento en Eibar

El Eibar era lo único que tenía. Mendilibar había estado en Lanzarote y el segundo técnico era de Gran Canaria. Acerté de lleno. Me dijeron que fue el año más frío después de más de 60 años”. Más tarde pasó otro año cedido en el Celta, después de que la Real rechazara su llegada: “Yo fui al Celta porque no pasé las pruebas médicas en el Getafe. Les dijeron que tenía problemas de pubis, como en la selección sub’17. Pero en Eibar jugué sin tener que parar”.

Un ídolo sky blue

En el Manchester City es un dios. Con estatua incluida: “El Valencia es mi casa en España. Apostaron por mí con 14 años, fueron grandes temporadas. Me tuve que ir por los problemas financieros. En Mánchester viví la transformación de no meterse en Champions a ganarlo todo. Tenían una confianza increíble en mí. Mancini me llamaba desde noviembre y fui al final de año. Se dudaba de mi físico en Inglaterra y al final estar diez años y tener una estatua ni te lo imaginas”.

David Silva habló de sus orígenes con Juan Carlos Valerón, que es de su mismo pueblo, Arguineguín: “Empezó jugando en mi pueblo, con mi padre y con su hermano, que era muy bueno. Pude jugar con él y era un poco como un entrenador. Era un referente para todos nosotros, no solo como futbolista, sino como persona. Juan Carlos es un fenómeno”.