La pretemporada de la Real Sociedad avanza, superado ya su ecuador. El arranque liguero se acerca, a menos de dos semanas vista. Y el verano txuri-urdin transcurre con normalidad, entre partidos amistosos y noticias de fichajes. De forma paralela, mientras, han comenzado las distintas previas de las competiciones continentales, eliminatorias a las que en el club blanquiazul también miran, de reojo. El próximo viernes 26 de agosto se celebrará en Estambul el sorteo de la fase de grupos de la Europa League. Y la posición en el mismo de la propia Real ya se cocina.

1 ¿Qué hay en juego?

Tampoco nos engañemos. Lo que el equipo guipuzcoano se juega estas semanas, siguiendo desde la distancia las previas de la Champions (cuyos eliminados van cayendo sucesivamente a la Europa League), es muy poca cosa si lo comparamos con lo que realmente depende de él. Su rendimiento deportivo marcará a partir de septiembre la suerte que corra en los torneos continentales. Pero a nadie le amarga un dulce y siempre resulta más recomendable integrar en el sorteo el bombo 2, antes que el 3. Esto es precisamente lo que se va a decidir durante el próximo mes, mientras los txuri-urdin, sin poder hacer nada al respecto, cierran la pretemporada e inician la Liga.

2 ¿Es importante?

Repetimos. La trascendencia de integrar el bombo 2 o el 3 en el sorteo es relativa, si la comparamos con la de todo lo que viene después. Sin embargo, lo acontecido en las dos últimas temporadas viene a demostrar que la dificultad del grupo blanquiazul puede llegar a verse muy marcada por la ubicación del equipo en la cita de Estambul. Tanto en 2020 como en 2021 figuró en el bombo 3. Y a partir de ahí la Diosa Fortuna hizo de las suyas, emparejando a la Real con potentes cabezas de serie (Nápoles y Mónaco) y con outsiders de gran nivel (AZ y PSV salieron del bombo 2). Si los de Imanol ven finalmente crecer su estatus, aumentarán las opciones de tener una sorteo más benévolo, aunque nada estaría garantizado a este respecto.

3 ¿Ha progresado la Real?

Sí. Acudirá al sorteo del 26 de agosto con su mejor coeficiente UEFA de este último lustro. En 2020 y 2021, el equipo txuri-urdin se presentó en el evento con el coeficiente de la Liga española (y no el suyo propio) como credencial. ¿Por qué? Porque su guarismo era inferior al de la propia Liga española. Y porque, ante casos así, el máximo organismo europeo viene a proteger a los equipos que han tenido el mérito de sellar el billete en un campeonato potente. Este año, mientras, la Real irá ya a Turquía luciendo coeficiente propio (26.000 puntos), cifra superior a los 19.571 (Liga) que presentó el pasado curso. Las participaciones europeas de la 2017-18 y de las dos últimas campañas, con los guipuzcoanos superando siempre la fase de grupos, han incrementado su caché.

4 ¿De qué depende ahora?

A día de hoy hay solo doce clubes con billete asegurado para las liguillas de la Europa League. Los resultados de las distintas previas determinarán la identidad de los otros 20. El 26 de agosto serán sorteados 32 equipos, divididos en cuatro bombos de ocho según orden de coeficiente. Y la esperanza de la Real reside en ocupar un sitio entre la 9ª y la 16ª plaza de dicho ranking, para así integrar el bombo 2. Figurar en el primero, el de los cabezas de serie, es ya imposible: si bien los txuri-urdin tienen ahora mismo el octavo coeficiente de todos los clasificados, saben de forma matemática que serán relegados por al menos un nuevo club que les hará retroceder a la novena posición. Figurar en el bombo 4, el de los equipos de menor nivel, también resulta imposible: en todo el panorama europeo solo hay once escuadras susceptibles de sumarse a la Europa League con mejor coeficiente que la Real, cuyo peor ranking sería así el 19º. Es decir, bombo 3.

5 ¿A dónde hay que mirar?

A las previas de la Champions, donde juegan nueve de esos clubes con mejor coeficiente que la Real y susceptibles por lo tanto de empujarle hacia abajo en el ranking: Dinamo Zagreb, Estrella Roja, Viktoria Plzen, Copenhague, Mónaco, PSV, Dinamo Kiev, Rangers, Benfica. Y cabe mirar igualmente a las previas de Europa League, donde compiten las dos amenazas restantes: Gante y Olympiacos. En lo que se refiere a los nueve de la Champions, a los blanquiazules les conviene que superen sus compromisos, lleguen a la fase de grupos del máximo torneo y no caigan así al segundo. Respecto a Gante y Olympiacos, mientras, cabe desearles derrotas que les releguen a las liguillas de la Conference. 

Vías de posible acceso a la fase de grupos a la Europa League.

A estas tempranas alturas de la competición, las explicaciones respecto a las opciones en cuanto a bombos corren el riesgo de resultar demasiado engorrosas. Así, un intento por traducirlas a lo coloquial pasaría por comparar la situación con una quiniela txuri-urdin. La Real se enfrenta a un boleto con once casillas. Y sabe que puede permitirse hasta ocho fallos si quiere figurar en el bombo 2.A partir del noveno, mientras, cae ya al tercero.

De momento, la Real ya habría errado en un resultado: sabe que se le va a colar sí o sí un equipo más por delante en el ranking. Será el perdedor del Mónaco-PSV (3-10 de agosto). El ganador, mientras, se convertirá en el protagonista de una de las diez casillas que se mantienen vivas. ¿Por qué han apostado los txuri-urdin en cada una de ellas?

Hay siete en las que se han dejado llevar por el corazón. El buen txuri-urdin siente simpatía este verano por Copenhague, Rangers, Benfica, Dynamo Kiev y por el ganador del Mónaco-PSV. Interesa que venzan para que accedan así a la fase de grupos de la Champions, ya que cualquier tropiezo les relegará a la Europa League. Y la Real mira con malos ojos, en cambio, a Gante y Olympiacos: ya están en las previas del segundo torneo continental, así que lo que interesa es que pierdan.

Quedarían solo tres casillas por dilucidar, las de Dinamo Zagreb, Viktoria Plzen yEstrella Roja. ¿Qué procedería con ellos? Por lo general, que ganen, avancen y accedan a la Champions. Pero si caen en esta próxima ronda (3-10 de agosto) y deben jugar la eliminatoria final de la Europa League, tocará desearles la derrota en sus duelos. La Real, así, mantiene con estos clubes un propósito general: no coincidir con ellos en el sorteo de Estambul.