La Real Sociedad ya se ha puesto manos a la obra y Asier Illarramendi es uno más dentro del plantel que dirige Imanol Alguacil. El mutrikuarra afronta la nueva temporada con aires renovados y con el objetivo de volver a sentirse importante dentro del grupo después de unos años en los que las lesiones no le han dado tregua.

Illarra reconoce estar "con ganas". Reconoce que "los dos últimos años y medio para mí no han sido nada fáciles. He estado mucho tiempo fuera del equipo, del día a día, y no es fácil. Me ha tocado mucho estar solo, con los fisios, pero sin mis compañeros y no han sido momentos fáciles". Por eso, el deseo es uno solo: "Espero que este año las lesiones me respeten. Hemos hecho dos entrenamientos y me siento a gusto. Todavía quedan muchos entrenamientos por delante y las primeras sensaciones son buenas y estoy con ganas de compartir con mis compañeros todos esos momentos".

Ha vivido una etapa "muy dura" porque "no estoy acostumbrado a estar tanto tiempo fuera del equipo". Le ha dado "muchas vueltas" a la cabeza. "Ya sabemos lo que es una lesión y a veces se complican y estas fuera más de lo que creías", recalca un futbolista para quien "el tiempo todo lo cura, pero es duro salir de una y meterme en otra". El consejo es claro: "Lo que hay que hacer es seguir trabajando porque también llega el momento en el que te sientes bien". Y eso es lo que está sucediendo en este preciso momento: "Los dos primeros entrenamientos estoy bien, sin molestias y a gusto. Hay que tener la cabeza fría, tirar hacia adelante y volver a soñar con esos momentos buenos que has vivido".

Ha sido un verano un poco distinto para el mutrikuarra, que ha intentado desconectar de una temporada para olvidar en lo personal, pero en el que también le ha tocado trabajar. No hay que olvidar que acabó el pasado campeonato con un esguince, "no fuerte, pero que me sacó del equipo otra vez", recuerda. "He querido desconectar, pero también fortalecer el cuerpo", confiesa. "Llevo dos años y medio fuera. A pesar de que he trabajado duro, los entrenamientos solo no son lo mismo que los entrenamientos con todos. Siempre quedas un poco más débil", asegura.

Por ese motivo, "he estado trabajando porque físicamente quería llegar bien y como no tenía molestias, también he utilizado el verano para trabajar. Me gusta el deporte y lo he practicado. Tenía ganas de juntarme al equipo". En este sentido, agradece que haya comenzado la pretemporada para volver a ver a sus compañeros: "En vacaciones algunos nos hemos visto, pero algunos son de fuera, están con su familia. Además de compañeros somos amigos y había ganas de vernos, de juntarnos, de contarnos nuestras cosas, de ver dónde hemos andado".

Sí ve la luz al final del túnel, pero no se fía: "Ojalá. He visto bastantes luces y al final venía la oscuridad. Espero que esta vez la luz dure mucho". Eso sí, de momento, no está sufriendo las temidas agujetas, aunque es consciente de que, más tarde o más temprano, llegarán: "Estos primeros días son entrenamientos para coger el ritmo, pero luego ya empezarán las agujetas. Serán los entrenamientos más duros, pero es lo que toca. La pretemporada es para eso, para preparar el cuerpo para la temporada y si no vienen, mejor, pero casi todos pasamos por eso", apostilla.

"El objetivo será mejorar la temporada anterior"

Después de una campaña inolvidable como la pasada, con la consecución de la Copa del Rey y con ese quinto puesto final. Illara es consciente de que la exigencia será mayor para el año que viene. Él mismo se muestra ambicioso y reconoce que "el objetivo será mejorar la temporada anterior". Sostiene que el pasado ejercicio fue "muy bueno" para todo, tanto para los jugadores como para la afición, pero "el objetivo de este año será ese, mejorar la temporada anterior", advierte, siendo consciente también de que "será fácil mejorarla. Pero el equipo está con muchas ganas, estamos entrenando bien, ya sabemos el potencial que tenemos. Este año también queremos seguir demostrándolo. También tres competiciones este año, pero ya demostramos que tenemos muy buena plantilla, competitiva, y tenemos que estar todos enchufados. El año pasado ya se vio la fuerza del colectivo".