- Ya queda menos de un mes para la final de la Copa ante el Athletic. La madre de todas las batallas. La afición de la Real ha afrontado con mucha ilusión las cinco competiciones que encaraba su equipo esta esperanzadora temporada. Pero llegado el mes de abril de 2021, un año después de la fecha oficial y una vez eliminados de la Supercopa, de la Copa de este año y de la Europa League, todos los focos se centran en el derbi más importante de la historia. Como ya publicó NOTICIAS DE GIPUZKOA, el duelo se adelantó un día sobre lo previsto, del Domingo de Resurrección al Sábado Santo 3 de abril y sin la presencia de público en las gradas.

Pocas veces han hecho más dos clubes para que sus respectivas aficiones estuvieran presentes en una gran final de Copa. Desgraciadamente, no ha sido posible, y en las directivas de ambas instituciones son conscientes de que el duelo se disputará con La Cartuja vacía. El Gobierno Vasco les ha dejado muy claro que no va a dejar salir a una expedición grande de ninguno de los dos conjuntos en Semana Santa, entre otras cosas porque en la capital sevillana nadie entendería que con las fronteras de la comunidad autónoma cerradas y sin poder sacar a sus respectivas y adoradas vírgenes en procesiones, deambularan por las calles de su ciudad hinchas de ambos conjuntos. Es más, lo más probable es que en las próximas fechas Lehendakaritza anuncie medidas muy estrictas para la fecha del encuentro con el objetivo de evitar que se pueda celebrar el título derrotando el eterno rival. Si todo continúa así, lo normal es que el toque de queda se mantenga, por lo que la afición del equipo vencedor deba esperar hasta la mañana del día siguiente para festejarlo en las calles, ya que, entre otras cosas, tampoco permitirán las reuniones de muchas personas en espacios cerrados aunque sea toda una final de la Copa.

La Real ha demostrado con el envío de la carta de Illarra y la simbólica entrada para la final que se ha resignado a que el duelo se dispute sin su gente. En la misiva confirma que el equipo ya se prepara para competir sin su aliento: "Por fin llega el día. Queda menos de un mes y tenemos sentimientos encontrados. Nos entristece que no puedas venir a Sevilla. Hubiera sido increíble. Jugamos -y ganamos- para hacerte feliz".

A menos ya de un mes para la disputa de la madre de todas las batallas, la situación en la enfermería de Zubieta es bastante buena, aunque haya muchos frentes abiertos. Se puede decir que hay cuatro puestos en disputa, ya que los otros siete parecen asignados. Los cerrados son la portería, en la que jugará Remiro; uno de los centrales, que, salvo sorpresa mayúscula y porque se lo ha ganado, será Le Normand, con Monreal en la izquierda. En la medular, por delante del mediocentro, Merino y Silva son básicos, al igual que Oyarzabal e Isak por delante. Por lo tanto, los frentes abiertos son el lateral derecho, en el que si Zaldua se recupera y se encuentra en condiciones de jugar, podría sentar a Gorosabel; uno de los centrales, ya que si Aritz deja atrás sus problemas en el tobillo, se perfila como un fijo, lo que podría relegar al banquillo a Zubeldia. El mediocentro, al que aspiran Illarramendi, que parte con ventaja aunque tenga que recuperarse de su contractura, Guevara y Zubimendi. Y el extremo derecho, en el que parte como favorito Portu sobre Januzaj, aunque puedan cambiar muchas cosas hasta la final.

El derbi se ha retrasado tantas veces y el fútbol es tan efímero que el cartel de claro favorito y el bonus de la confianza se lo han ido repartiendo ambos contrincantes. Lamentablemente, en las últimas fechas, sobre todo después de la consecución de la Supercopa, un torneo menor, y el cambio de entrenador, el Athletic ha ganado muchos puntos y ha superado el clima de depresión que se había instalado entre su parroquia. Cada vez queda menos para la final, pero hasta entonces la Real jugará en casa ante Levante y Barcelona y visitará al Granada, mientras que el Athletic, tras disputar la semifinal ante el Levante hoy, se enfrentará en la Liga en su estadio al Granada y al Eibar y viajará al Wanda y a Vigo. Tic toc... Un día menos.

Si le respetan las lesiones, Imanol ya tiene siete puestos asignados para el gran derbi, salvo el lateral derecho, central, pivote y extremo