- Anoeta se viste de gala para recibir al Nápoles, primer campeón europeo que visitará el estadio con la remodelación ya finalizada. La pena es que no habrá público por la pandemia, ya que el ambiente que se hubiera vivido, con la Real líder de la Liga recibiendo al segundo del Calcio, hubiese sido de época.
No parece que el club referente del sur de Italia viaje excesivamente preocupado por el potencial txuri-urdin. No estaría de más que Gattuso repasara no solo las estadísticas actuales de los de Imanol, que hasta la fecha son excelsas, sino también los resultados que han cosechado los equipos grandes que han visitado tanto Anoeta como, anteriormente Atocha. No están nada mal, porque por sus dos estadios han desfilado clubes de postín, que han llegado a reinar en el Viejo Continente.
En lo que respecta a Anoeta, en la edición de 1998-99 marcada por el asesinato a Aitor Zabaleta en las puertas del Vicente Calderón, en el estadio de Amara cayeron el Dinamo Moscú, finalista europeo, por 3-0 y el Atlético de Madrid, en aquella maldita eliminatoria, por 2-1.
En la primera Champions League, tras el cambio de formato de la competición, la Juventus tuvo que conformarse con empatar 0-0 y el Galatasaray, que necesitaba vencer para eliminar a la Real, se quedó con la miel en los labios al empatar De Paula su tanto inicial.
En la segunda comparecencia en el torneo más grande de clubes, con Arrasate en la 2013-14, el Manchester United tampoco pasó del empate 0-0, en un partido bastante deslucido porque los locales estaban virtualmente eliminados tras las tres jornadas anteriores sin puntuar.
En el nuevo estadio realista se ha mancillado un poco la hegemonía txuri-urdin en las dos últimas participaciones europeas, en unos datos a tener en cuenta y que no invitan tanto al optimismo de cara a mañana. En la Europa League de la 2017-18, el Zenit de San Petesburgo selló su liderato imponiéndose por 1-3 en una floja actuación txuri-urdin. Y en la última en la Champions, en la citada 2013-14, se llevaron los tres puntos dos clubes con menos nombre, pero con título europeo como el Shakhtar Donetsk, que reventó el sueño realista en el estreno al vencer 0-2, y el Bayer Leverkusen, sin que la Real se jugara nada, venció 0-1 para certificar su clasificación.
En Atocha era otra historia. A la Real no le tosía nadie. Los donostiarras casi igualan el 3-0 que se trajo de Milán el Inter, al derrotarle por 2-0 en el mejor partido de la historia del viejo campo en la Copa de la UEFA de 1979-80. En la Copa de Europa 1982-83, la Real alcanzó las semifinales después de imponerse en casa a los campeones europeos Celtic (2-0), Sporting de Portugal (2-0) y empatar con el Hamburgo (1-1). En la Copa de la UEFA 1988-89, volvió a pasar el Sporting luso (0-0), y el Colonia y el Sttutgart, subcampeones europeos, perdieron 1-0.
Solo el todopoderoso Liverpool de John Toshack, en la segunda participación realista en la temporada 1975-76, fue capaz de asaltar el fortín txuri-urdin al plasmar su indiscutible superioridad con un 1-3 y luego un 6-0 en la vuelta en Anfield Road.
El Nápoles, campeón de la UEFA de 1989, abrirá una nueva época. La del tercer estadio en un Anoeta cerrado sin pistas. Con gente sería distinto...
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