- El viernes espera a la Real una jornada especial. El equipo txuri-urdin y todos sus aficionados experimentarán el cosquilleo propio de cualquier cita con los bombos europeos. Los de Imanol se clasificaron directamente para la fase de grupos de la Europa League terminando el pasado curso en la sexta posición, por lo que se han visto exentos de las tres incómodas previas que habrían disputado en caso de ser séptimos. Tal obligación está correspondiendo al Granada, cuyo camino habla bien a las claras de lo traicioneras que pueden ser estas eliminatorias.
Los andaluces arrancaron con una cómoda victoria a domicilio ante el Teuta albanés, y repitieron triunfo en la segunda ronda contra el Lokomotiv de Tibilissi. Sin embargo, su último escollo será el Malmo sueco en tierras escandinavas, una cita exigente que, de torcerse, puede dar al traste con las ilusiones de media temporada. Cabe destacar además que, lejos del foco de los medios estatales, algunos partidos de las primeras eliminatorias no llegaron a disputarse al detectarse diversos positivos por coronavirus en equipos contendientes. Estos fueron directamente eliminados de la competición (por ejemplo el Prishtina kosovar). Y no hace falta recordar aquí cómo ha afectado este verano la pandemia al vestuario blanquiazul.
Reconducida esta situación, la atención txuri-urdin en clave europea se centra ahora en conocer en qué bombo figurará la Real en el sorteo del viernes a mediodía en Nyon (en un principio estaba previsto en Atenas, pero se ha trasladado finalmente a la ciudad suiza). Los guipuzcoanos saben ya que no figurarán en la nómina de cabezas de serie, y que su coeficiente es lo suficientemente alto como para evitar el bombo de los más modestos. Entrarán así en el segundo o en el tercero. Su destino final dependerá de los resultados, el jueves por la noche, en las últimas eliminatorias previas.
Les interesa, lógicamente, que se den en ellas el mayor número de sorpresas posibles, para ganar puestos en el ranking final y entrar en ese segundo bombo. De momento, como posibles rivales más potentes (cabezas de serie) están ya clasificados Arsenal, Roma, Napoli Benfica, Leverkusen y CSKA de Moscú.
