REAL Remiro; Zaldua, Llorente, Le Normand, Muñoz; Zubeldia, Merino (Guevara, min. 76), Odegaard; Portu, Isak (Januzaj, min. 79), Oyarzabal (Barrenetxea, min. 56).

MALLORCA Reina; Gámez, Martin Valjent, Raillo, Lumor; Febas (Pozo, min 67) , Baba, Dan Rodríguez, Lago Junior (Kubo, min. 70); Budimir (Prats, min. 83) y Cucho Hernández.

Goles 1-0,min. 46:Isak. 2-0, min. 57: Barrenetxea. 3-0, min. 80: Portu.

- Parece fácil, pero no lo es. Y se dice rápido, aunque se hiciera eterno. La Real volvió a ganar dos meses después en Anoeta al peor visitante de la categoría. El Mallorca llegó como el rival propicio para recuperar la senda de la victoria tras dos derrotas consecutivas, por primera vez en lo que llevábamos de temporada, pero no tardó en confirmar que no existe rival pequeño. Durante muchos minutos de la primera parte, demasiados, sobrevoló por el estadio el inefable fantasma de los colistas y su incomprensible leyenda que cuenta que no pierde ninguno ante la Real desde 2016.

El triunfo se antojaba obligatorio. Ahora no nos acordamos pero en ese momento, ya en este 2020 que se convirtió a partir de esos días en inolvidable, lo cierto es que había bastantes dudas sobre la capacidad del equipo para garantizar su solvencia mientras disputaba Liga y Copa. El tema del apartado Willian José había intoxicado el ambiente y a falta de cinco jornadas para el cierre del mercado, su continuidad en el club parecía encontrarse más en el aire que nunca. Es más, la directiva lo daba por perdido convencida de que iba a llegar con una propuesta a la altura de su caché y de sus pretensiones económicas. En mitad de esa atmósfera, la Real compareció al duelo despistada. Poco centrada. Como si fuera a llevarse los tres puntos sin bajarse del autobús. Y eso ya no se consigue ni en la Copa ante terceras. Menos aún si enfrente estaba un equipo bien trabajado, con las ideas muy claras y que había mantenido el mismo bloque que le había dado el ascenso.

Remiro, en la que él mismo cataloga como su mejor parada de la temporada, salvó a los realistas en un chut con vuelo envenenado de Lemor. Isak perdonó antes de un descanso en el que -no se sabe si volaron botellas por el aire- Imanol logró hacer sonar el despertador. En la primera jugada de la reanudación, los realistas hilvanaron su mejor jugada de la noche que finalizó el sueco desde cerca tras una buena dejada de Portu. El murciano estuvo en todas, ya que también asistió a Barrenetxea, quien anotó de rebote con algo de fortuna, y cerró la goleada al aprovechar un rechace de Reina.

En ese momento todavía no lo sabía, pero con el triunfo ante el Espanyol en la Copa y este contra el Mallorca, la Real acababa de iniciar una de las mejores rachas de toda su historia. Por fin empezaba lo bueno de verdad que estábamos esperando y presagiando...