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El fichaje de Rulli tampoco se pudo cerrar ayer

Papeleo La Real espera que hoy sea el día en que se firme todo

El fichaje de Rulli tampoco se pudo cerrar ayer

donostia - La Real continúa sin poder cerrar el fichaje de Rulli. A lo largo del día de ayer siguieron los contactos entre la filial del fondo de inversión, que tiene como sede Londres, el Club Deportivo Maldonado y las oficinas de Anoeta sin que se pudiese llegar a buen puerto. En el club realista se muestran tranquilos, ya que se lo esperaban después de haber sufrido los dos veranos pasados situaciones similares en el momento de cerrar su incorporación.

El hecho de que haya varios intereses, privilegios y actores protagonistas en las conversaciones provoca que todos quieran tener perfectamente marcado y definido su territorio a la hora de plasmar el acuerdo.

Mientras tanto, el socio de Facundo Fraga llegó ayer por la mañana a Donostia y ambos ya se han reunido con la Real para poner en papel todos los términos que ya habían acordado desde el pasado mes de abril.

El que en cambio no parece tan contento es Rulli, ya que su intención era la de aparecer por Donostia unas pocas horas para firmar y emprender viaje a Argentina, donde le espera su familia para disfrutar de los pocos días que le quedan antes de incorporarse el lunes a la disciplina de la selección argentina que va a disputar los Juegos Olímpicos de Brasil. El meta tenía incluso los billetes preparados para subir a un avión ayer por la noche, pero, desgraciadamente, el anuncio oficial todavía se puede demorar bastante en el tiempo. Es más, una voz autorizada del club donostiarra no descartaba ayer que incluso tuviera que marcharse a su país sin poder ser presentado. Aunque lo normal es que sea a lo largo del día de hoy cuando se concrete todo de una vez y haya fumata blanca. Rulli contaba con varios billetes bloqueados para evitar esta tardanza y para que, en cuanto se sellara todo, emprender el retorno.

La Real tiene claro que va a afrontar una importante inversión de siete millones de euros y que el cierre de todo hay que hacerlo con corrección. Es decir, que no sean las urgencias del meta por reencontrarse con su familia, algo lógico y normal, lo que marque el tiempo de la rúbrica de su fichaje por la Real.

Su continuidad le va a convertir en el quinto refuerzo más caro en la historia blanquiazul, lo que refleja la confianza que se tiene en su progresión. El contrato que va a firmar, por seis años, con cantidades que le van a situar entre los mejor pagados de la plantilla, deja abierta también la posibilidad de que en dos o tres años, si aparece un grande con una oferta millonaria, la Real acceda a traspasarle. Este compromiso no escrito que adquiere se justifica sobre todo por la inequívoca voluntad del portero de quedarse en Donostia pese a contar con una millonaria oferta del Manchester City. Lo que sucedió con el Valencia el pasado verano no quedó tan claro como su deseo de seguir en la Real aunque Guardiola le ofreciera ser el meta titular en la Champions. Rulli es feliz en el club realista y en la ciudad, tal y como se ha cansado de repetir, y su fichaje es una de las noticias que aguarda con más ilusión una afición que ya había comenzado a hacerse la idea de que viniese un nuevo portero. Cuando solo cuenta 23 años recién cumplidos, el argentino habría hecho olvidar a una leyenda realista como Claudio Bravo. - M.R.