Un desembarco franjirrojo
2.000 seguidores rayistas, de ellos 1.300 con entrada, tienen previsto viajar a donostia el fin de semana
Mientras asuntos como la reforma de Anoeta o la planificación de la próxima temporada centran buena parte de la actualidad en el entorno realista, el Rayo aterriza mañana en el estadio txuri-urdin para disputar un partido clave en su lucha por la permanencia. Los vallecanos recibirán en la última jornada al Levante, en un duelo cuyos puntos prácticamente se dan por sumados, por lo que la salvación de los franjirrojos pasará en gran medida por lo que hagan en Donostia. Tienen 35 puntos y 38 podrían no resultar suficientes, por lo que no pueden permitirse regresar de vacío a Madrid.
La afición rayista, consciente de la importancia de la cita, tiene previsto desplazarse en masa para animar in situ al equipo en Anoeta. La Real envió en un principio 1.200 localidades, puestas a la venta en Vallecas el miércoles y agotadas en unas pocas horas. El club txuri-urdin remitió entonces 120 localidades adicionales, igualmente adquiridas de forma rapidísima. Técnicamente, 1.320 seguidores franjirrojos animarán a los de Paco Jémez desde el graderío, aunque se prevé que sean muchos más. El masivo desplazamiento movilizará a cerca de dos millares de hinchas, y quienes no dispongan de entradas tratarán de hacerse con algún billete en suelo guipuzcoano para poder asistir al encuentro. La Real ha especificado en las redes sociales que si no envía más entradas a Vallecas es por motivos de seguridad.
En lo meramente deportivo, Jémez apunta a disponer en Anoeta un 4-4-2 con Miku y Javi Guerra en punta, una dupla que le está dando buen resultado, mientras que en el extremo izquierdo actuaría Bebé pese al incidente del pasado fin de semana con el técnico en el banquillo. - M.R.