donostia - De quince puntos posibles, el Athletic solo ha sumado tres. El inicio liguero de los de Ernesto Valverde no ha sido nada bueno, una circunstancia que puede sorprender atendiendo a los resultados cosechados por los vizcainos durante las últimas campañas, pero que parece tener una explicación en el exigente verano vivido por el equipo. La pretemporada arrancó con dos objetivos iniciales en el horizonte, y ambos se situaban en el mes de agosto, lo que condicionó toda la preparación. Se trataba de acceder a la fase de grupos de la UEFA y de intentar conquistar la Supercopa. Hubo éxito en ambos casos.

Ahora el primer pico de forma de la campaña ya ha pasado. Es la sensación que ofrece el cuadro rojiblanco, más en el aspecto psicológico que en el físico. Y por eso, de momento, los resultados no terminan de acompañar en el torneo de la regularidad. Por eso, y por los caprichos de un calendario que ya ha emparejado al Athletic con Barcelona, Real Madrid y Villarreal. Hay un poco de todo. Pero resulta difícil disociar la actual situación clasificatoria de los vizcainos de todo el ajetreo vivido en julio y agosto mientras el resto de los equipos de la Liga se dedicaban únicamente a prepararse para la competición.

desde el 30 de julio El Athletic disputó su primer partido de competición oficial el jueves 30 de julio, cuando, por ejemplo, la Real se encontraba en China cumpliendo con compromisos publicitarios tras medirse el día anterior al Rayo. Los vizcainos recibieron al Inter de Bakú, imponiéndose por dos goles y encarrilando una eliminatoria que terminarían solventando la siguiente semana en Azerbaiyán. Y después afrontaron la doble confrontación de la Supercopa frente al Barcelona. Aprovecharon la baja forma de los culés para golear 4-0 en la ida, y completaron una fenomenal actuación en el Camp Nou en la que contuvieron a Messi y compañía a la perfección para alzarse con el título (1-1, con gol de Aduriz).

Redondear el verano pasaba por superar la segunda eliminatoria continental, contra el Zilina eslovaco, un rival que se impuso en su estadio por tres goles a dos y que obligó al Athletic a remontar en tierras vascas. Lo lograron los de Valverde gracias a un tanto de Elustondo, pero sufrieron para certificar el billete, que obtuvieron justo cuatro semanas después de arrancar su temporada oficial. Fue un mes lleno de emociones, celebraciones, trabajo y sufrimiento, tras el que ha sido inevitable en septiembre experimentar el bajón que mantiene al Athletic en la zona baja de la tabla.

“buenas sensaciones” Valverde no parece excesivamente preocupado por los resultados de su equipo, sin embargo. No le agrada tener solo tres puntos, claro, pero subrayó el viernes que las sensaciones sí son buenas. El 2-0 de Ipurua y el 3-1 de El Madrigal suponen dos borrones importantes, pero el Athletic ha competido de tú a tú tres veces con el Barça y otra con el Real Madrid. El entrenador ve bien a su equipo y confía en empezar a puntuar a domicilio esta noche en Anoeta, donde se va a encontrar a una Real que ha vivido un verano menos apretado en cuanto a compromisos.