donostia - El caso Rulli continúa en una tensa cuenta atrás. Pese a que desde el club txuri-urdin no se haya querido confirmar ni valorar públicamente el grave peligro que supone la aparición en escena del Valencia, si no sucede un inesperado, brusco e improbable cambio de timón por parte del meta y sus agentes, lo lógico es pensar que su continuidad en Donostia debería de confirmarse esta semana.

El club ché está ejerciendo una fuerte presión tanto al fondo de inversión como a los representantes del futbolista, ya que los parámetros económicos en los que se mueve su cada vez más suculenta oferta son insignificantes si se compara con los 30 millones que viene de pagar por Rodrigo, o los 25 que abonó en enero por Enzo Pérez.

El Valencia tiene el visto bueno de sus abogados para seguir adelante con la operación y, según filtraron ayer a medios locales, cuenta con el sí del portero. Por lo tanto, será el propio Rulli, cuando regrese a finales de semana de sus vacaciones en Cancún, el que tendrá que dar la cara y tomar la decisión definitiva entre jugar en la Real o marcharse al Valencia.

Eso, mientras, en el club realista continúan creyendo que tienen todo atado.