Navarra apoya retirar la simbología y los honores a los franquistas sin apoyo de UPN y PP

Pamplona – En un lunes marcado por el aniversario de la proclamación de la Segunda República, la Mesa del Parlamento de Navarra acordó dar su apoyo a los ayuntamientos que están retirando simbología, honores y menciones incluidos en el censo provisional de simbología franquista. Eso sí, lo hizo sin el consenso de UPN ni PP.

El presidente, Unai Hualde, la vicepresidenta primera, Ainhoa Unzu, y el secretario segundo, Adolfo Araiz, votaron a favor; el vicepresidente segundo, Juan Luis Sánchez de Muniáin, y la secretaria segunda, Yolanda Ibáñez se abstuvieron.

El contenido de dicho acuerdo había sido rechazado previamente como Declaración Institucional, presentada por los PSN, EH Bildu y Geroa Bai, el apoyo de Contigo-Zurekin y con el voto en contra del Grupo Mixto y las abstenciones de UPN y PPN.

El texto argumenta la finalidad de retirar símbolos, cambiar nombres de calles o distinciones porque cuando se retiran símbolos o se cambian nombres de calles o retirar distinciones “a personas que participaron en vulneraciones de derechos humanos o colaboraron en la organización del golpe militar de 1936, en la violencia desatada tras él o en el régimen dictatorial posterior de una forma significativa”, eso “se hace para construir una mejor convivencia, evitando que esa presencia y reconocimiento públicos ofendan a las víctimas”, dice el texto.

En el segundo punto el Parlamento de Navarra reitera su “compromiso con las políticas de memoria democrática y en especial con la retirada del espacio público de símbolos que representen una agresión a los valores de la paz, la convivencia, la libertad y la democracia”.

En la votación de la declaración ni UPN, PP, ni Vox apoyaron el texto. El portavoz de UPN, Javier Esparza, considera que Geroa Bai y PSN pretendían “salvar a Asiron” por el cambio en el nombre de las calles de Pamplona, por el que dejarán de utilizarse las denominaciones de la calle Víctor Eusa, en el barrio de Buztintxuri; la calle General Los Arcos, en el Ensanche; y la plaza Ángel María Pascual, en Beloso Alto. “Estamos en contra de la dictadura franquista, pero los nombres de las calles no son por ideología. Eusa es un arquitecto reconocido y Pascual un escritor reconocido. No se puede castigar la trayectoria profesional de la gente” justificó Esparza.

La portavoz del PPN, Irene Royo, dijo que las leyes están para cumplirlas, pero que no comparten el “contexto” de la declaración, con estos cambios en el callejero. El PP considera como UPN que las calles son por las trayectorias profesionales de esas personas.

Si UPN y PPN se abstuvieron, Vox votó no. por no compartir la ley de Memoria Histórica”.

En el caso de EH Bildu, para su portavoz Mikel Zabaleta, el sentido del voto de UPN, PP y Vox demuestra que “existe riesgo de involución” y que “la ideología de Franco no murió con él”.

Mientras, Carlos Guzmán, de Contigo-Zurekin, explicó que apoyan la declaración, pero que a su grupo le parece incoherente que PSN, EH Bildu y Geroa Bai presenten esta declaración cuando están resignificando Los Caídos y no derribándolo.

Pablo Azcona, portavoz de Geroa Bai, defendió la procedencia del acuerdo y dijo no entender las abstenciones, “sobre todo la de UPN”, ante un propuesta por el cumplimiento de la ley”. También Inma Jurío defendió la oportunidad del entendimiento progresista un 14 de abril, y destacó valores “que se defendieron durante la República”, como “la igualdad de todas las personas y la igualdad de oportunidades”, y su “plena vigencia en una sociedad democrática como la actual, que, además, se está viendo atacada por conductas xenófobas y de odio hacia esa igualdad de las personas”.