La tramitación de los presupuestos de Euskadi para el año próximo sigue avanzando en los términos que eran previsibles. Si Sumar era el grupo que mayores reticencias había mostrado a pactar el proyecto del Gobierno Vasco, ayer se apeó definitivamente del tren y confirmó que presentará una enmienda a la totalidad, al igual que lo hará Vox. De este modo, todos los esfuerzos de la negociación se centrarán ahora en EH Bildu y PP, que expresaron distintos grados de predisposición al acuerdo y con quienes el Departamento de Hacienda y Finanzas que lidera Noël d’Anjou celebrará una nueva reunión el lunes.

Este viernes finalizó el plazo que el consejero dio a los partidos de la oposición –salvo Vox, excluida de las negociaciones– para que respondiesen a las propuestas presupuestarias que hizo a cada uno de ellos en la segunda reunión mantenida el pasado miércoles. Dicha respuesta se fue conociendo a la largo de la mañana, empezando por el único parlamentario de Sumar, Jon Hernández, que confirmó que no apoyarán las cuentas al considerar “imposible llegar a un acuerdo aceptable”.

Por este motivo, avanzó la presentación de una enmienda a la totalidad al proyecto. En un comunicado, explicó que habían trasladado “una propuesta clara y detallada” con sus prioridades políticas y presupuestarias, “pero el Gobierno Vasco no ha presentado ninguna alternativa concreta ni ha mostrado disposición a negociar cambios sustanciales”. Sus aportaciones ascienden a 755 millones de euros, una cantidad que se aleja de su peso real en el Parlamento Vasco, con un solo representante sobre un total de 75.

En el tablero de juego quedan, por tanto, EH Bildu y PP, circunstancia que, en sí misma, representa una traba para la coalición abertzale. Así lo expresó ayer su coportavoz parlamentaria, Nerea Kortajarena, que reclamó a D’Anjou que aclare “si quiere hacer el camino con el PP o con EH Bildu”, dado que “no entra en la cabeza de nadie” que se pueda negociar “una cosa y la otra” con ambos grupos. Dijo que la propuesta de acuerdo que les han presentado es “similar” a la que se trasladó al PP, y criticó que les hayan dado “un ultimátum” de 48 horas para aclarar si estaban dispuestos o no a seguir con la negociación.

Tras lamentar los “mensajes contradictorios” que, a su juicio, les está lanzando el Ejecutivo vasco, ya que “se nos pide concreción y propuestas realistas y cuantificadas pero cuando las llevamos, se nos responde con un planteamiento difuso, falto de concreción y sin cifras”, avanzó que EH Bildu analizará el lunes la situación en la reunión de su Mesa Política. El portavoz del PNV en el Parlamento Vasco, Joseba Díez Antxustegi, criticó respecto a EH Bildu que en Nafarroa y en Madrid “el kilo presupuestario está mucho más barato” que en Euskadi.

En cuanto al PP, durante el pleno de control de ayer el propio lehendakari, Imanol Pradales, trasladó al presidente de los populares vascos, Javier de Andrés, su deseo de que puedan alcanzar el consenso necesario para recibir su apoyo a los presupuestos. De Andrés desveló que ayer mismo presentaron una propuesta más detallada a Nöel d’Anjou y recordó que las “prioridades” de su partido son reforzar las partidas presupuestarias destinadas a sanidad y seguridad. Reclamó por ello que les dé una respuesta concreta y “con cifras” a sus aportaciones a las cuentas, dado que “hablando simplemente de filosofía no es posible llegar a un acuerdo”.

Marco de negociación

Desde el Gobierno Vasco afirmaron ayer que “continuamos la negociación con PP y Bildu”, con los que se reunirán de nuevo el lunes. Fuentes de Lakua añadieron que “el Gobierno ha presentado un marco amplio sobre el que poder seguir trabajando”, ya que “más allá de los partidos que apoyan al Gobierno entendemos un acuerdo como algo positivo para Euskadi”. Dicho marco para la negociación fue trasladado por el propio consejero Noël d’Anjou a los grupos en sus encuentros del pasado miércoles, con más de 50 medidas concretas para cada formación. Este paquete no especificaba una cuantía económica pero sí compromisos políticos que no se han desvelado por respeto a sus interlocutores.

El final de la película se conoce de antemano, y es que el 20 de diciembre se aprobarán de forma definitiva los presupuestos merced a la mayoría absoluta que suman los compañeros en el Gobierno Vasco, PNV y PSE. D’Anjou ha insistido en su deseo de lograr un consenso más amplio, y ayer el parlamento jeltzale Joseba Díez Antxustegi reiteró que “si los grupos de la oposición están dispuestos de verdad a acercarse a esas posiciones, estaremos encantados de poder ampliar esos consensos”. Advirtió eso sí de que se debe negociar sobre medidas y contenidos concretos “para solucionar problemas concretos”.

A favor del acercamiento con EH Bildu estaría el hecho de que este partido haya aceptado desligar el debate fiscal del presupuestario, ante la insistencia de Lakua de que solo negociará en el marco de sus competencias. En cuanto al PP, el paquete de propuestas relacionadas con la sanidad y la seguridad que ha presentado, cuantificadas en 177 millones de euros, puede ser factible. El lunes marcará otra estación de calado hacia el posible acuerdo.