El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, considera que el proceso independentista en Catalunya de 2017 se alimentó de un malestar similar al que a su juicio infunde Vox, que propone como solución a los problemas de los ciudadanos establecer más fronteras y restringir la inmigración. Además, piensa que el impacto que tuvo la pandemia de coronavirus contribuyó a restar apoyos al separatismo catalán.

En el libro 'Tierra Firme' al que ha tenido acceso Europa Press, se señala que se intensificó el miedo de la gente con campañas de desinformación, noticias falsas y mentiras "como las de Vox cuando aseguraba que el problema de los españoles son unos cuantos menores que viven solos en nuestro país".

De este modo hace referencia a las alertas lanzadas desde el partido de Santiago Abascal contra los menores no acompañados, la relación con el aumento de criminalidad y el gasto que generan las ayudas que se les conceden, que incluso llevaron a sus carteles electorales para las elecciones autonómicas de Madrid en 2021.

"Siempre ocurre: los que instilan temor y desconfianza en la ciudadanía se ofrecen como salvadores. Su gran solución a todos los problemas es la misma: menos inmigración, más muros, más fronteras. El procés bebió también de ese malestar", señala Sánchez.

A renglón seguido sostiene que haber logrado "aterrizar Catalunya en la realidad y en la solución de los problemas cotidianos" en la pasada legislatura "es un avance político y social".

En otro capítulo del libro, dedicado al impacto de la pandemia en las políticas que tenían pensado desplegar, Sánchez hace otra referencia al independentismo y señala que el impacto del virus ayudó a que muchos catalanes dejasen de optar por el separatismo.

"Creo que el virus contribuyó a que muchos catalanes cobraran conciencia de que levantar nuevas fronteras entre europeos no era la mejor forma de solucionar los problemas de autogobierno".   

LE GUSTARÍA HABLAR MÁS CON FELIPE GONZÁLEZ

A continuación Sánchez hace un elogio del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y señala que buena parte del tiempo que ha pasado conversando con él lo han dedicado a Catalunya. Señala además que cuando se enfrentó a la "difícil" decisión de conceder los indultos a los líderes independentistas del procés, Zapatero le aconsejó y le apoyó.

"Hay perspectivas que solo puede tener un presidente y la suya siempre me es útil", señala. Además dice que en pocos líderes ha visto un instinto político como el suyo y señala que su conversación y sus gestos siempre le reconfortan porque "él nunca contempla la opción de la queja o el desánimo".

Sánchez también dedica unas líneas al primer expresidente socialista de la etapa democrática, Felipe González, recuerda que le conoció cuando le nombraron secretario general del partido y que ha hablado con él en algunas ocasiones aunque, "siempre menos de lo que me gustaría", según indica.   

FALTA DE REFERENTES ACTUALES

"Con su propia personalidad y distintas formas de hacer política, creo que él y José Luis han sido los dos mejores presidentes del Gobierno de la democracia española", señala Sánchez de González, que ha sido la principal voz crítica dentro del partido contra la ley de amnistía y los pactos del PSOE con los independentistas.

Sánchez también señala que González le dijo en una ocasión que su generación había tenido las cosas más fáciles que la del actual presidente, "porque ya existía un manual sobre lo que había que hacer", el modelo de las democracias europeas a las que el Estado se quería parecer.

Sin embargo considera que ahora su generación "carece de referentes", aunque las políticas de algunos países sirven de inspiración, por el hecho de estar entre los países que disfrutan de mayores cotas de bienestar y democracia, según indica. "Para imaginarnos el mundo del futuro ahora hemos de inventarlo y construirlo", señala.   

TIENE PENDIENTE UNA MARATÓN

Sánchez confiesa que una de las cosas pendientes en la vida que tiene es "correr un maratón". "Soy gran aficionado al deporte, del que obtengo una energía vital para mi bienestar mental y para reducir el estrés", asegura, al tiempo que explica que "distintos avatares" le han impedido hasta ahora realizarlo.

"Cuando corro, las largas distancias me ayudan mucho a estructurar la mente. Me gusta ver la política bajo el prisma de las largas carreras de fondo", subraya, incidiendo en que "para tomar decisiones acertadas en un mundo cambiante, resulta imprescindible mirar a la vez la pisada y el horizonte". "Cada pequeño paso es importante; avistar el final, también", agrega.

Así las cosas, reconoce que el 23J "ha dejado un panorama no exento de dificultades" pero se muestra "convencido de que volveremos a superarlas con el trabajo y el esfuerzo de todos, así como con la acreditada capacidad de diálogo de mi Gobierno".

"A las viejas incertidumbres les sucederán nuevas certezas, pero hay que avanzar para alcanzarlas", sostiene Sánchez, asegurando que su "empeño como presidente" no es otro que ese. "Y en él seguiré trabajando para llegar a tierra firme", remacha, empleando así las palabras que dan título al libro.