El PNV ha denunciado este jueves las pintadas realizadas en el portal de la vivienda donde reside la alcaldesa de Arrasate, María Ubarretxena, donde desconocidos han realizado varias pintadas la pasada noche en las que se puede leer Mozalik ez, adeierazpen askatasuna (Mordazas no, libertad de expresión), en referencia a la Ley Mordaza. Los jeltzales han considerado que se "ha traspasado el límite del ámbito del ejercicio público al ámbito privado y familiar".

Según explican en una nota, las pintadas han sido realizadas con un spray de color verde en todo el portal, "lo que constituye un grave ataque a la libertad personal y familiar con el único objetivo de coaccionar, amedrentar y acosar a la alcaldesa". El PNV ha señalado que se han interpuesto la denuncia correspondiente tanto en la Policía Municipal como en la Ertzaintza por "coacciones y daños".

Los jeltzales lamentan que "no es la primera vez que acosan a la alcaldesa en su ámbito familiar, traspasando completamente la línea de respeto y convivencia". "No entendemos la razón de esa pintada, ni la razón de dirigirla hacia ella si no es por el mero hecho de amedrentar. Una mañana más con insultos y faltas de respeto sin sentido, sin escrúpulo, sin razón", denuncian en el comunicado, en el que desmienten la críticas a la gestión municipal que subyace en la pintada. "No es verdad que en Arrasate se aplique ninguna Ley Mordaza. En Arrasate contamos con diferentes lugares habilitados para expresar nuestra opinión, colocar carteles o pancartas. Vivimos en un pueblo libre de expresión y esa expresión debe ser respetuosa hacia todas y todos", afirman.

Finalmente, el PNV ha mostrado su "máximo apoyo a Maria y su familia" y su más rotunda "condena y rechazo" a estos "graves hechos" que nos retrotraen a tiempos pasados. En este sentido, el equipo de gobierno (PNV-PSE) llevará una propuesta a la Junta de Portavoces del lunes día 12.00 horas para condenar lo acontecido.

También el año pasado

Como dice el comunicado jeltzale, no es la primera vez que la alcaldesa es objeto de ataques personales. En febrero del año pasado el Gobierno municipal denunció otra pintada y carteles. En esta ocasión, además de ir contra Ubarretxena, también se ponía en el foco a la Policía Municipal y a la Ertzaintza, a quienes tildaban de "cipayos", mientras que junto a una foto de la alcaldesa y los agentes policiales se había escrito en euskera "detened el acoso a los jóvenes" en contra de las medidas para evitar la transmisión del coronavirus.