La ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno español, Isabel Rodríguez, ha eludido responder hoy expresamente si el Ejecutivo está de acuerdo o no a la decisión del presidente valenciano de deflactar la tarifa del IRPF para rentas inferiores a 60.000 euros. Pero de manera genérica sí ha pedido un "discurso responsable" a todas las CCAA porque cada vez que se reducen ingresos "está el debate de qué recortar".

Así lo ha afirmado durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en la que ha evitado concretar la posición del Gobierno español, pese a que los informadores la han preguntado en varias ocasiones si respalda la decisión de Ximo Puig y si va a tomar una decisión similar.

Rodríguez ha insistido en que la política fiscal del Gobierno es la de la "justicia social" para que esta crisis "no la pagan los de siempre" y ese será, ha dicho, el enfoque del paquete fiscal que prepara el Ejecutivo con el fin de que los que más tienen más contribuyan y que no se produzcan "regalos fiscales" de la clase media y trabajadora a los más ricos.   

MEDIDAS PARA CORTAR LA SUBIDA DE LA INFLACIÓN "DE RAÍZ"

Ha añadido también que el paquete de medidas en el que trabaja Hacienda, que se baraja presentar el jueves de esta semana, "va a paliar el problema de raíz", es decir, evitar que la "inflación siga subiendo".

Pero dicho esto, ha dejado claro que la política fiscal no se puede diseñar "en abstracto" porque cada vez que se toma una decisión en materia fiscal y se reducen ingresos hay que plantearse "dónde se reducen y a quién afecta esa reducción".

En este sentido, ha precisado que el Gobierno "respeta a las CCAA", pero ha pedido a todas que tengan un "discurso responsable", aunque lo ha hecho de manera genérica y sin mencionar expresamente el anuncio realizado esta mañana por Ximo Puig, de deflactar la tarifa del IRPF a las rentas de menos de 60.000 euros.   

EL GOBIERNO QUIERE DIFERENCIAR LA PROPUESTA DE PUIG DE LA DEL PP

No obstante, fuentes del Ejecutivo han tratado de diferenciar la medida anunciada por Ximo Puig de la propuesta de deflactación de la tarifa del IRPF realizada por el Partido Popular. Incluso, desde el Gobierno se afirma que el presidente valenciano tiene toda la legitimidad para hacer lo que considere oportuno.

En cualquier caso, la Portavoz ha insistido en que cada vez que se habla de reducir ingresos hay que tener en cuenta que son recursos que después se van a necesitar para contratar más maestros, sanitarios, para ayudar a las personas más desfavorecidas o para la dependencia.

"Cada vez que hablamos de rebajar está el debate de qué recortar", ha exclamado para acto seguido precisar que "este es un Gobierno que no quiere recortar derechos y prestaciones a las personas que más lo necesitan en este momento de dificultad".

Por lo tanto, ha recalcado que esa será la política fiscal que el Gobierno está "ultimando con absoluto rigor y coherencia con la política europea".

Además, ha argumentado que España tiene que ser "coherente" con sus políticas porque ha pedido ayuda a Europa y va a recibir 140.000 millones de euros.

"COMPETICIONES A LA BAJA"

Por su parte, el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha cuestionado también la deflactación del IRPF para rentas inferiores a 60.000 euros anunciada por Ximo Puig, al comentar que "depende de cómo se hagan" estas medidas y que no le gustan "las competiciones a la baja".

La medida del IRPF presentada este martes por el presidente socialista de la Comunidad Valenciana es similar a la propuesta del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, de rebajar este impuesto por debajo de los 40.000 euros, lo que ha puesto en una situación incómoda al PSOE.

Preguntado por la medida de Puig en una rueda de prensa en el Congreso, el portavoz del grupo parlamentario socialista ha dicho que lo que ellos van a defender es la propuesta sobre fiscalidad que va a presentar esta semana el Gobierno, cuyo objetivo es "ayudar a las rentas más bajas de este país".

No obstante, ha añadido que "las competiciones a la baja" en el ámbito fiscal no le gustan "mucho" y ha subrayado que la obligación de los socialistas es "armonizar" impuestos y que haya "corresponsabilidad fiscal". "Eso estará también en el epicentro de la propuesta que haga el Gobierno", ha afirmado.

En concreto, ha criticado el "'dumping' fiscal" que en su opinión impulsan comunidades autónomas gobernadas por el PP, como Madrid y Andalucía, al coincidir en la supresión del impuesto de patrimonio, pero ha evitado aclarar si cree que Puig también está alentando "competiciones a la baja" con sus medidas fiscales.

"Estoy dispuesto a avalar la propuesta del Gobierno de España, que es la que redistribuye la riqueza y reparte los costes de manera justa", ha respondido.

Al respecto, ha comentado que su postura es de apoyo a la propuesta fiscal del Gobierno, pero asegura que en ningún momento ha dicho que esté en contra de la medida de Puig sobre el IRPF.

Preguntado concretamente qué opina sobre deflactar el IRPF, ha dicho que "todo depende de cómo se haga", ya que ha alertado de que en algunos lugares se ha hecho de forma "absolutamente regresiva".

"Pero este Gobierno prefiere en vez de jugar a eso de la deflactación usar los recursos que se están obteniendo de forma extraordinaria por la inflación allí donde sea más necesario", ha puntualizado.

Fuentes socialistas han expresado su disconformidad por el anuncio de Puig de deflactar el IRPF a rentas inferiores a 60.000 euros, aunque señalan que el presidente valenciano forma parte de un Gobierno de coalición con Compromís, lo que "tiene sus complejidades".

Las mismas fuentes consideran que deflactar el IRPF "no es un buen invento" e insisten en que la medida adecuada es mantener "un Estado fuerte" con recursos económicos para poder emprender políticas.

Por otra parte, el portavoz del PSOE en el Congreso ha dicho que está convencido de que los presupuestos generales del Estado para 2023 saldrán adelante, pese a los reproches formulados por los socios del Gobierno de Unidas Podemos y por socios parlamentarios como ERC al no avanzar en temas como la ley de Vivienda.

"Estamos en la negociación, todas las negociaciones tienen tiras y aflojas, soy hijo de un sindicalista, se muy bien lo que es esto.  A veces se ponen órdagos, envites, pero al final se acaba en un pacto", ha augurado.