“Si fuera a remodelar el Gobierno, no lo diría”

- El descalabro de la izquierda en las elecciones andaluzas disparó los rumores de que Pedro Sánchez volverá a introducir cambios en su Gobierno, y también en el PSOE a nivel de partido. El presidente español contribuyó a alimentar esa hipótesis con la respuesta ambigua que ofreció ayer en la rueda de prensa para presentar el decreto anticrisis: “Si lo fuese a hacer, no lo diría. Si les dijera que no lo voy a hacer, no me creerían”. Añadió que se siente “muy cómodo y muy orgulloso del equipo del Consejo de Ministros y de la dirección federal del PSOE”, pero no es una respuesta esclarecedora en la medida en que nadie esperaba que dijera lo contrario y que comenzara a desautorizar a sus ministros o a sus subordinados en el PSOE.

En puertas de que se cumpla un año desde la última remodelación, ya no se oculta que la presencia de algunas alcaldesas en el Consejo de Ministros no ha dado resultados, se acumula desgaste en materia de política exterior por el giro sobre el Sahara y en Seguridad Social se ha desatado una crisis con dimisiones ante Escrivá, al mismo tiempo que se aproxima el tramo final de la legislatura y quizás se busca otra clase de impulso y enfoque. Aunque el espionaje ha provocado una crisis con ERC, son pocos los que harían una apuesta con la salida de Robles. En cuanto al PSOE, cunde la sensación de que también podría haber movimientos en las portavocías.