gasteiz - El PNV obtuvo ayer 40.127 votos y ganó en Álava las elecciones en las que ni la visibilidad de Mari Mar Blanco, ni su mensaje alineado con las tesis más moderadas del PP vasco, ni la mejora generalizada de los conservadores en España permitió a los populares recuperar la simbólica plaza con capital en Vitoria-Gasteiz. En el territorio alavés esta era la principal incógnita, ese cuarto escaño que en abril se llevó Iñaki Ruiz de Pinedo, de EH Bildu, dejando fuera al popular Javier Maroto, cuya dureza en la campaña le pasó factura.
Ahora entraba también en la ecuación Unidas Podemos, pues el escaño de Juan López de Uralde se ponía en cuestión por el mal resultado que se preveía para los de Pablo Iglesias y por los diferentes sondeos centrados en el territorio, pero ayer la coalición morada fue la tercera más votada, y EH Bildu, de nuevo con Ruiz de Pinedo, se quedó con ese último escaño, esta vez sin tanta emoción como hace medio año. Si entonces solo 384 votos separaron a conservadores y soberanista, ayer Ruiz de Pinedo obtuvo 2.047 sufragios más que Blanco. Es curioso constatar que pese a la caída de la participación, EH Bildu y PP lograron movilizar a su electorado, quizá por esa pugna que mano a mano mantenían los unos con los otros. Los populares no obtuvieron escaño pero recabaron un millar de votos más que en abril, y los soberanistas sumaron 2.600 nuevas adhesiones.
Por arriba, se confirma la tendencia de las dos últimas citas con las urnas para elegir diputados y senadores. El PNV ganó las elecciones, con más holgura que en abril, pese a que históricamente en estos comicios han sido partidos estatales los que alcanzaban el primer puesto. Los jeltzales se hicieron con 40.127 sufragios, por delante de un PSOE que con Isabel Celaá alcanzaba los 37.325 votos, 2.802 votos de diferencia frente a los 578 de la convocatoria anterior.
La ligera bajada de la participación (del 69,51% de abril al 68,20% de ayer) se tradujo en una también liviana pérdida de votos en los tres primeros partidos que obtuvieron escaño, PNV, PSOE y Unidas Podemos. No ocurrió así con PP y con EH Bildu, pero tampoco con Vox, cuyos resultados, en contraste con los de Ciudadanos, fueron un reflejo de lo ocurrido en todo el Estado. Los de Albert Rivera perdieron 4.578 votos, pasando de 7.082 a 2.504, mientras que la ultraderecha engrosó sus apoyos en 815 sufragios, pasando de los 5.608 del 28 de abril a los 6.423 de ayer.
Por municipios, en Vitoria-Gasteiz ganó el PSOE el 28 de abril y volvió a ganar ayer, superando a PNV, Unidas Podemos y PP, mientras que en Laudio también se repetían los resultados de hace seis meses, con victoria del PNV y segundo puesto de EH Bildu; igual que en Amurrio. Allí, Santiago Abascal, natural de la localidad ayalesa, sacó un voto más que en abril.
En Agurain, por su parte, tampoco había vuelco y EH Bildu volvía a ganar las elecciones, mejorando ligeramente su respaldo, y se imponía a los jeltzales. En Iruña Oka, feudo tradicional socialista, el PSOE volvía a ganar las elecciones a muy escasa distancia del PNV, y en Oion los de Pedro Sánchez se imponían otra vez y Unidas Podemos también mantenía su segunda posición.
No hubo novedades en las elecciones al Senado, por último, donde el PNV consiguió revalidar sus tres escaños, los de Almudena Otaola, Juan Carlos Medina y Rosa Peral, mientras que la socialista Julia Liberal también lograba representación.