madrid. El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha acusado al PP de estar detrás de una "cruel campaña" de acoso contra él, que se inició cuando acordó encarcelar a los principales implicados en el caso Gürtel. A su juicio el objetivo de esta campaña es forzar "la impunidad" de las conductas delictivas que él ha investigado. Así lo afirma el magistrado en el escrito de alegaciones que presentó ayer ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en el que reclama al órgano de gobierno de los jueces que no le suspenda cautelarmente de sus funciones mientras el Tribunal Supremo (TS) tramita las tres querellas por prevaricación interpuestas contra él (por la investigación del franquismo, sus cobros en Nueva York y las escuchas a los encarcelados por el caso Gürtel).
Garzón también solicita en su escrito que el vicepresidente del Consejo, Fernando de Rosa, y las vocales Margarita Robles y Gemma Gallego "se abstengan de participar" en las deliberaciones sobre su suspensión y pide que, "caso de no hacerlo", se tramite la recusación de los tres. La razón: su cercanía al PP y animadversiones personales.
acusación El juez recuerda que la estrategia de "desprestigio, acoso y desautorización" de su labor jurisdiccional, "sin precedentes en la historia judicial española", comenzó a partir de febrero de 2009 cuando se conoció la investigación del caso Gürtel y las implicaciones de altos cargos del PP en la trama de corrupción. A su juicio, no ayuda el hecho de que los vocales del CGPJ hayan sido nombrados a propuesta de los partidos políticos, entre ellos, dice, el que ahora "se muestra públicamente a favor de mi depuración por haber investigado una trama de corrupción que salpica a alguno de sus componente".
Se trata, según argumenta, de una campaña alentada por personas a quienes él imputó y jaleada por medios de comunicación interesados, por motivos ideológicos y personales, en terminar con su carrera. Según afirma, el objetivo del acoso no es tanto cuestionar su persona, sino su labor jurisdiccional, "intentando poner en tela de juicio la regularidad de las instrucciones y, con ello, forzar la impunidad de las conductas delictivas que el juzgado osó investigar".
El juez hace hincapié en que cuando, a instancias del fiscal, acordó la prisión de los principales implicados en Gürtel, "personalidades próximas a quienes supuestamente se beneficiaron de las presuntas prácticas delictivas entablaron una cruel campaña contra mí". Entre ellos cita al ex ministro y diputado Federico Trillo; y a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. El juez asegura que nunca ha dudado en investigar y perseguir graves delitos, "con independencia de que sus autores pudieran tener una u otra adscripción política o ideológica".
argumentos Recuerda que después de que el CGPJ archivara varias quejas contra él por parte del PP y el sindicato ultraderechista Manos Limpias, la estrategia "se ha llevado por la vía más gruesa de las querellas por prevaricación que han sido admitidas por el Tribunal Supremo", en contra de la opinión del fiscal.
En su escrito el juez se muestra convencido de que las tres causas abiertas contra él en el Alto Tribunal serán archivadas o en "cualquier caso" resultará absuelto y hace hincapié en que los querellantes han actuado de mala fe.
Como motivos para pedir la abstención de Fernando de Rosa, y las vocales Margarita Robles y Gemma Gallego, Garzón alega "interés personal en el asunto" de De Rosa, al que atribuye "amistad íntima" con el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, "persona de la cual se dedujeron indicios de delito", por lo que se inhibió a favor del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. También alega que Gallego ha mostrado tener una "enemistad manifiesta" con él, al igual que Robles.