DONOSTIA. En línea con todo lo dicho en las sesiones anteriores, los testigos de la defensa que declararon ayer en la Audiencia Nacional afirmaron que Euskaldunon Egunkaria no tenía ningún tipo de relación con ETA. Así se pronunciaron Jonan Fernández, el filósofo Joxe Azurmendi o la periodista Nerea Azurmendi, ex- subdirectora del diario.

Sin embargo, la noticia estuvo en lo dicho por los peritos propuestos por la defensa, que confirmaron los errores en la traducción de los documentos que, supuestamente, vinculan al periódico con ETA de los que podría deducirse una "intención de reflejar ideas que no existen" en los originales.

Así lo manifestaron una de los intérpretes que han sido llamados por la defensa para hacer un segundo cotejo del ya realizado por la Audiencia Nacional sobre las traducciones policiales de varios documentos intervenidos a la dirección de la banda entre 1990 y 1993. Unos documentos que demuestran, según la acusación popular ejercida por Dignidad y Justicia y la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), la vinculación económico-financiera entre ETA y el diario.

Los peritos indicaron que los originales han sufrido añadidos, supresiones y un "gran número de errores no aislados" que influyen en la comprensión de los documentos y que no se detectaron en el primer cotejo realizado por un traductor de la Audiencia Nacional, lo que, en su opinión, demuestra que "o no se ha hecho o se ha hecho sin ningún rigor".

Como ejemplo, citaron una de las frases incluidas en uno de los documentos y que en el primer cotejo se tradujo como "En estos papeles se puede entender que el director era y no era el que ofrecía información a ETA" cuando, según precisaron los peritos, la traducción correcta es "En los citados papeles, al parecer, se ofrecía información sobre el director de Egunkaria".

Ayer también declararon a petición de la acusación popular varios guardias civiles en calidad de peritos. A la pregunta sobre la capacidad de influencia que tenía ETA en el nombramiento del consejo de administración de Egunkaria, respondió que el diario carecía de accionistas y que el poder estaba "en manos de unos pocos", afirmación incierta. El 5 de junio de 2002 se celebró la última asamableea de accionistas, con cuatro de los acusados presidiendo en mesa del consejo. El juicio proseguirá el lunes y se espera que quede visto para sentencia el miércoles 3 de febrero.