El barco se hunde. Decían de las trabajadoras sociales municipales. El martes pasado me topé con su manifa en una de sus jornadas de huelga. Me reconoció una de las más veteranas. Recuerdo que le ayudé a preparar algunos temas de su oposición hace 30 años. Me transmitió la zozobra que atraviesa el servicio, que atiende situaciones personales muy delicadas, muchas veces ignoradas por una ciudadanía que tampoco desea conocerlas con detalle.

La demanda se ha incrementado un 25% en seis años, pero los recursos económicos y humanos no han crecido en la misma proporción y, me asegura, se evidencia la incapacidad, falta de profesionalidad y ausencia de liderazgo por parte de las direcciones, técnica y política, nombradas a dedo con criterios ajenos a los estrictamente profesionales. Eso se traduce en la ausencia de prioridades establecidas, desorganización, sobrecarga laboral, falta de estabilidad en los equipos y ralentización administrativa con las ayudas de emergencia, que imposibilita ofrecer un servicio con la rapidez, eficacia y calidad que la ciudadanía merece y reclama de una administración moderna, ¡en un San Sebastián!

De chavales, cuando veíamos algún capuchino, corríamos a besarle el cordón anudado que ceñía su hábito, y el seráfico religioso sonreía paciente, mientras nos regalaba una bendición. Conociendo la Casa, el paisaje y el paisanaje, me limité a ofrecerle mi cíngulo virtual y mi mayor comprensión, sin bendición, claro. Bastante tienen. Nihil sub sole novum. (Eclesiastés 1:10).

Sálvese quien pueda

El consejero de Industria, amigo y compañero de pupitre de Pradales, que admitió desconocerlo todo del tema en su primera comparecencia ante los medios y que concilia a partir del viernes en Londres, Mikel Jauregi, encargó un diagnóstico de la situación y un Plan Industrial a un año vista, por 242.000 euros, a la consultora navarra Zabala Innovation. Por lo visto, la anterior en el cargo no le dejó ni un posit sobre la mesa y en la cartera con la que escenificaron el traspaso sólo había un periódico con el crucigrama hecho y un manual actualizado del uso de las puertas giratorias.

En Cultura, la responsable del ramo, Ibone Bengoetxea, ha encargado al bufete madrileño Gabeiras y Asociados, SLP el proyecto de la Ley del Sistema Cultural de Euskadi por 80.000 euros, que contempla también un diagnóstico de la situación, un proyecto de ley para presentarlo como propio al Parlamento Vasco y la “asistencia en su tramitación”.

No cabe menos que preguntarse, sin poder sacudirse la perplejidad, por la evidente ausencia de ideas que aportaban los consejeros, sus equipos y cuantiosos asesores, al ser nombrados para el cargo, por la falta de un programa partidario que, refrendado en su momento por los votantes, deberían implementar y por el trabajo que reservan a los funcionarios de sus respectivos departamentos, si tienen que recurrir a empresas externas. De los parlamentarios, sin comentarios.

Tampoco me tranquilizan lo más mínimo los que sustituirán a los actuales tripulantes de las instituciones, porque tampoco los veo capaces. Un problemón.

Efectivamente, el barco se hunde y ¡sálvese quien pueda, mujeres y niños primero!

Rabia

Hace unos días fallecía de rabia en un hospital valenciano (¡Mazón dimisión!) un varón de 44 años que, haciendo turismo en Etiopía, había sido mordido por un perro en julio de 2024. Durante su ingreso en el hospital se le suministró la inmunoglobulina antirrábica, así como a su mujer, el único contacto considerado de riesgo, como indica el protocolo de urgencia para los casos de exposición al virus, especialmente cuando no se ha recibido vacunación previa, como era el caso. Error fatal de planificación cuando se va a viajar a países fuera de la Europa de nuestros “valores”. Además, en Sanidad Exterior –Administración del Estado– andan mal de personal y la atención se demora mucho, por lo que hay que prever las vacunas con mucha antelación.

La herida tuvo una buena evolución tras su limpieza y desinfección con los medios habituales, razón por la que el hombre ni acudió al médico ni le prestó mayor importancia y la anécdota cayó en el olvido hasta que, transcurrido casi un año, lo habitual son tres o cuatro semanas, el paciente hubo de acudir a la consulta de Infecciosas, aquejado de síntomas neurológicos que hicieron sospechar a los médicos, lo que el Centro Nacional de Microbiología, referente de esta enfermedad en España, confirmó el pasado 29 de mayo: Era positivo a rabia.

Se trata de una zoonosis que mata a 70.000 personas al año, principalmente en África –Marruecos incluido– y Asia, y se transmite por la saliva de animales infectados, generalmente perros, pero pueden ser otros: gatos, murciélagos…, en el momento de la mordedura.

La particularidad del virus rábico es que, al contrario que otros agentes infecciosos, no progresa en el organismo por la sangre donde se destruye, sino lentamente, por el sistema nervioso, a una velocidad de tres milímetros por hora, hasta llegar al cerebro. Por eso, cuando más cerca de la cabeza se produzca la mordedura, antes aparecerán los síntomas. De ahí también la urgencia en administrar el tratamiento tras la exposición al virus.

El pasado 3 de abril fue detectado otro perro rabioso en Melilla, el segundo este año. Capturado por los Servicios Veterinarios, murió en la perrera a los dos días. El análisis del cerebro confirmó la enfermedad.

La vacunación de los perros y de los gatos, si salen a la calle con sus dueños, y el control de estos animales erráticos es fundamental para prevenir la rabia en humanos y, gracias a las medidas de control y vacunación obligatoria, la rabia está casi erradicada en Europa.

Hoy domingo

Ensalada de tomate y endivias. Albóndigas con champiñones. Cerezas de Milagro y pastel de chocolate negro, avellana y caramelo de Gasand. Blanco Abad Dom Bueno, de uva godello, de Carracedo (León). Agua del Añarbe. Con el café, petit fours de la misma procedencia.