n Iruñea ya resuena el golpeteo de los carpinteros colocando el vallado del encierro. Queda todavía mes y medio, pero la capital navarra se prepara para unas fiestas calificadas de antemano como "épicas". Mari bajará este viernes desde Murumendi para anunciar el inicio de Loinatz Jaiak en Beasain y Bitorianatxo hará lo propio en junio para dar comienzo a las fiestas de Pentekostes en Bergara. Luego llegarán sanjuanes, sanmarciales... Ganas no faltarán. Dos años de restricciones derivadas de la pandemia han abierto el apetito de fiesta. Disfrutar será el leitmotiv de esos días de asueto pensados para romper la monotonía. ¿Cheque en blanco para pasarlo bien? Me temo que volveremos a las andadas prepandémicas y tendremos que lamentar nuevas agresiones sexuales enmascaradas bajo el exceso de alcohol y las drogas en supuestos malentendidos. Regresaremos a las calles pancarta en mano para exigir que "ni una más" y que "no es no" y las instituciones recordarán en sus programas que las fiestas hay que vivirlas con respeto. Tolosa, primer municipio en desplegar el ambiente festivo por sus calles, ya tuvo que enfrentarse a una denuncia por violación. Evitar nuevos casos está en nuestras manos. Demostremos que sí sabemos pasárnoslo bien sin tener que humillar, mangonear, despreciar, insultar, menospreciar, pisotear, pegar, violar o anular a quien tenemos al lado. l