TVE ha disfrazado de “homenaje” la emisión caduca y a destiempo del concurso El cazador Stars en el que participó Mayra Gómez Kemp un año después de muerta. Tal milagro, solo en lo televisivo, se debe a que el concurso se grabó cuando ella estaba viva, lógicamente, pero todo este tiempo el programa ha estado guardado en el cajón, junto a otras tantas entregas que han sacado ahora.
Si hubieran querido homenajear realmente a la presentadora, con la que dicen que fue su última aparición televisiva, lo habrían hecho emitiendo el programa cuando estaba viva, junto a algo con más enjundia, o si no dio tiempo entonces, al menos al poco de morir. Y no después de tener el concurso pasando en modo Guadiana por La 1 y La 2, ahora en el tramo matinal de concursos castigados tras su fracaso, donde lo vieron 107.000 personas (un escueto 1,2% de la audiencia).
El supuesto homenaje consistió en llevar a Mayra Gómez Kemp no ya junto a viejas glorias de la tele o excompañeros de gran show de la televisión que presentó, sino junto a dos jóvenes youtubers, uno de ellos famoso, según sus palabras, “por enseñar los mejores baños públicos donde cagar gratis”.
Aunque se lo pusieron relativamente fácil en las preguntas, la veterana presentadora arriesgó más que lo que marca la prudencia en su intento de recaudar dinero para la Asociación Española Contra el Cáncer –enfermedad que ella misma sufrió dos veces– y cayó eliminada. Al igual que los demás participantes del día, todo sea dicho.
El único homenaje o signo de admiración que se pudo intuir fue escuchar cómo le temblaba la voz a su presentador, Gorka Rodríguez, al mandar a casa a Mayra sin jugar la final. Luego, ante la falta de ganadores, todos volverían al plató para jugar una final alternativa que acabó con victoria conjunta, y con el presentador llorando como si supiera ya del futuro maltrato de TVE a esta emisión y a la presentadora que lo fue todo en televisión.