Despedimos el año con una tele pública que puede dar la noticia de la muerte de la hija del dictador Franco como si fuera la señora aquella que tanto hizo por los pobres. Una tele pública que sigue ocultando la información completa sobre la sentencia del Tribunal Constitucional acerca de la ilegalidad de reducir los miembros del consejo y una tele pública que tiene su mayor éxito en un juego de cocineros donde los niños trabajan al límite de sus posibilidades. No se sabe qué puede ser peor, si hablar de parte del franquismo en pleno siglo XXI, ignorar durante varios días las sentencias judiciales que le afectan o proponer como espectáculo el trabajo infantil. El otro día en Masterchef Junior, los pusieron a trinchar aves e incluso tuvieron que matar una anguila viva como si tal cosa. La verdad es que fue una extraña experiencia que empujó a muchos espectadores hacia el veganismo. Pero con estrenos tan groseros como ¿Cómo lo ves? de Carlos Herrera y el intento de recuperar la fórmula de José Luis Moreno en No es un sábado cualquiera, TVE ha demostrado que su objetivo es encontrar el más de lo mismo. Una estrategia poco ambiciosa que le ha llevado a cometer varios errores en su programación que han tenido que retirar o las han aguantado a pesar de su escaso seguimiento (Family, La pelu, Reinas...). Y si hiciéramos el balance que le corresponde a un día como hoy en el que se ha sabido que en Francia se han negado a producir una serie sobre los asesinatos en la discoteca Bataclán, aquí podríamos cuestionar el papel de Antena 3 al programar El caso Asunta, apenas unos meses después de la condena de los padres como asesinos de su hija. Aunque si por algo pasará a la historia este 2017 será por el fracaso de GH Revolution. Un bajón que puede animar a retirar este concurso -o lo que sea- de manera definitiva de la programación televisiva. Algo que podría suponer un antes y un después. Aunque todo esto ya lo veremos en el feliz 2018 que les deseo.
- Multimedia
- Servicios
- Participación
