Lo incomprensible en la red twitter.com/rockylogy
Twitter está lleno de de información tóxica. E Internet, en general, es un pozo de lodo sin fondo. No acabo de entender qué lleva a una persona a publicar contenidos que faciliten o incluso fomenten la anorexia o el asesinato. Tampoco cuál es el mecanismo mental de quien da a conocer a través de la red las supuestas bondades del nazismo. Por suerte hay otros usuarios como Rocky que, esta semana, han contestado punto por punto las tonterías de supuestas mejoras sociales aportadas por Hitler.
Enorgullecerse de ser tonto está de moda vozpopuli.com
Seguimos. Ya saben lo que es un youtuber: un generador de contenido, en este caso vídeos, a cambio de dinero. Y algunos, para alcanzar la notoriedad necesaria que les reporte beneficios, son capaces de mostrarse como los más tontos de su pueblo. Dmarble es solo uno más: ha grabado un nivel de carpintería durante un vuelo para demostrar, agárrense, que la tierra es plana porque en ningún momento el morro del avión se inclina para corregir la curvatura. Esto es de Premio Antinobel.
Entre todos lo fomentamos twitter.com/BonaVivant
Intento ser crítico, escéptico, como marca la moda de Internet que hay que calificarse, pero seguro que alguna vez se me ha escapado en esta columna el impulso a burbujas de Internet. Espero que no haya sido nada tan sangrante para los ojos como lo que ha hecho Marina D’or: un encuentro de “familias blogueras” para este fin de semana. Y, oiga, ¿eso de qué va? ¿Yo soy bloguero porque tengo un blog? ¿Y mi familia lo es por contagio? ¿Y si solo tengo Twitter no me dejan entrar? Luego criticamos...