No es corrupción, es impunidad

Ya no se trata de unos empresarios que pagan ostentosamente favores a unos intermediarios avariciosos que se encargan de montar el entramado y de tocar a los políticos necesarios. Desde los sobres que llevaban la B de Bárcenas a lo de ayer, una red de empresas para facturar actos de campaña y saltarse las normas, hablamos de algo diferente a la corrupción: hablamos de impunidad, de soberbia desmedida, de atracos a cara descubierta y hasta con risas, de desfachatez absoluta, de desvergüenza punible...

Estado de excepción y emergencia económica gacetaoficial.tuabogado.com

En medio de esta lluvia incesante de casos vergonzosos en la sede del Partido Popular también tenemos que hablar de Nicolás Maduro, el dictador venezolano. No es una cortina de humo, es una dictadura de facto ante la que no podemos quedar impasibles. Tampoco podemos encubrirlo como hacían quienes aseguraban que era mentira que en Venezuela se hubiese decretado estado de excepción. Pero es así, según la Gaceta Oficial del país: estado de excepción y de emergencia económica.

Eso no es conciliación, es una foto twitter.com/MiguelUrban

Miguel Urban me cae mal, como lo hacen todos los que pretenden vivir -e incluso lo logran- de darnos lecciones, de enseñarnos lo poco listos que somos nosotros y lo instruidos que son ellos para, al final, tomar decisiones tan fácilmente desmontables como la última: Urban aparece en el Parlamento Europeo con su bebé y dice que es conciliación. Pero, no: la conciliación no es llevar a un niño al trabajo y menos a un hemiciclo. Eso es buscar la foto e intentar colarnos una heroicidad que no toca.