El personal sanitario no entendemos nada. No entendemos esta forma de salir del estado de alarma teniendo las UCI llenas. No entendemos que un número significativo de nuestra juventud haya salido en tropel a celebrarlo, poniendo en riesgo su vida, la de sus familias y, en cualquier caso, saturando las urgencias por borracheras, peleas o accidentes.El personal estamos agotado, estresados y hartos de esta situación y falta de responsabilidad tanto de parte de nuestra sociedad como de nuestra clase política.Sabemos que es nuestro trabajo y lo hacemos lo mejor que podemos con todo el cariño que los propios pacientes reconocen y seguramente, si viene una quinta ola, nos modificaran vacaciones, permisos... Pero si un político irresponsable, del partido que sea, que ha apoyado quitar el actual estado de alarma, se pone enfermo de covid, tendrá la mejor cama hospitalaria y, seguramente, en el sector privado, como hay precedentes.La clase política nos viene aplaudiendo y reconociendo nuestro trabajo pero, una y otra vez, es incapaz de prevenir o hacerle frente al covid de forma contundente.Después de un año seguimos en la sanidad con un nivel de improvisación, de falta de planificación y unas condiciones laborales que ponen de manifiesto la falsedad de esos aplausos y las importantes deficiencias en la gestión política de la sanidad.La UE ha despilfarrado el dinero en promover vacunas y ha fracasado en que todos estemos ya vacunados. Eso nos trae más muertes, paro y pobreza. Pero nuestros políticos ni asumen ni piden responsabilidades ni dimisiones. El personal sanitario, si hay vacunas, estamos vacunando los siete días de la semana.Esta gestión política poco acertada nos ha traído más de 100.000 muertos, los hospitales muy saturados, una crisis económica y social sin precedentes y con unos profesionales de la sanidad que estamos ya al límiteSolo pediríamos responsabilidad a la clase política, que de forma consensuada tome medidas similares en todo el Estado, atendiendo a criterios sanitarios y de sentido común. Responsabilidad a la sociedad, especialmente a nuestra juventud, que sea solidaria e impulse la recuperación sanitaria.Finalmente exigir a las administraciones que tomen medidas para incluir a nuestra juventud en la recuperación económica. Son nuestro futuro y hoy el 40% está en paro.