Las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU son siempre de obligado cumplimiento; bajo riesgo de consecuencias graves para el incumplidor. Teóricamente, pues parece que la “Seguridad” del Consejo de Seguridad es solo para unos elegidos.

Ejemplo de ello es el 31/10/2025, uno de los días más negros de la historia contemporánea (a pesar de haber pasado casi desapercibido) ya que –de nuevo– se hace añicos el derecho internacional, facilitando el Genocidio Político por la indefensión del más débil.

En esta ocasión, a propuesta de EEUU, manipulando al Consejo de Seguridad de la ONU para que contemple como “posible” la autonomía del Sáhara Occidental dentro de Marruecos, incumpliendo así sus propias resoluciones y la legalidad vigente. Mientras, los palmeros ya aplauden sin saber muy bien a qué, pero sí a quién. Ya lo decía en mi artículo Sáhara y Real Politik publicado el 21/04/2022, en respuesta a la traición de Pedro Sánchez al pueblo saharaui, que iba en la misma línea. Ahora añadimos una injusticia más en el listado de las Real Politiks: El derecho del Pueblo Saharaui.

Para centrarnos, recordemos algunos puntos clave de la historia del conflicto:

-16-X-1975: El Tribunal Internacional de Justicia de La Haya proclama que Marruecos no tiene derechos históricos, políticos ni culturales sobre el Sahara Occidental. 

-06-XI-1975: Arranca la Marcha Verde marroquí con unos 350.000 civiles y 25.000 militares. Huida masiva de la población civil saharaui. Durante el éxodo bombardeos sobre quienes huían, incluso con Napalm y Fósforo blanco.

-Final de 1975 y principios de 1976: Procedentes del éxodo, asentamiento en los Campamentos de refugiados de Tinduf, en Argelia. 

-06-09-1991: El mismo Consejo de Seguridad de la ONU que ahora ve “creíble” a Marruecos por la posibilidad de la autonomía del Sáhara Occidental, aprobó su resolución 560. Era el “Plan de Arreglo”. Acuerdo entre el Frente Polisario saharaui y Marruecos, firmado también por la ONU. y la OUA (Organización para la Unidad Africana) para organizar un referéndum, como expresión de autodeterminación saharaui, para la independencia o la integración en Marruecos. Para ello hubo un alto el fuego y la creación de la fuerza de paz Minurso (Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental) para supervisarlo y organizar el referéndum. Esta resolución (como todas las del Consejo de Seguridad) debería ser de obligado cumplimiento.

Desde entonces, la “credibilidad” de Marruecos:

  • Ha construido un muro de 2.700 km sembrado con unos 10.000.000 de minas
  • Ha seguido colonizando el Sáhara Occidental
  • Conculca los derechos humanos contra la población saharaui.
  • Limita los derechos de la población saharaui en territorio ocupado.
  • Prohíbe cualquier símbolo identitario saharaui.
  • Prohíbe la entrada de medios de comunicación, comisiones políticas y humanitarias.
  • Explota recursos naturales que legalmente no le corresponden.
  • En noviembre de 2020 rompe el alto el fuego de 1991

Además, el 80% de la población ya son colonos marroquíes y las instituciones también están en sus manos.

¿Es creíble una autonomía con todos estos antecedentes? La respuesta creo que es obvia.

Además de la resolución 560, la 1238 de 1999 y la 1495 de 2003 del mismo Consejo de Seguridad reafirmaron su compromiso con el referéndum.

Aun así, la resolución 2797 de 2025 del Consejo de Seguridad (aunque vergonzante) no impone el plan de autonomía. Tampoco reconoce al Sáhara Occidental como parte de Marruecos. Sigue vigente la definición de la ONU: “El Sáhara Occidental es un territorio no autónomo pendiente de descolonización”. El Frente Polisario sigue siendo el representante legal del Pueblo Saharaui y la Minurso sigue siendo la misión de la ONU para el referéndum. Por todas estas razones, el referéndum no está muerto, manteniendo viva la esperanza.

Lo que le pedí en su día a Pedro Sánchez, sigue más vigente que nunca: 

Señores del Consejo de Seguridad, voy todos los años a los Campamentos de Refugiados de Tinduf, en Argelia, donde malviven unos 200.000 saharauis. Reúnanse ustedes con quienes llevan 50 años en ese infierno, visiten a quienes sortean los millones de minas dispersadas por Marruecos en los territorios liberados y no se olviden de quienes viven la represión en los territorios ocupados. Al calor de sus tés, mírenles a los ojos, escúchenles, y si tras ello no les convencen a ustedes, es que ustedes no son humanos. Pero si les convencen ustedes a ellos, descuiden, me habrán convencido a mí también. 

Lo contrario no será más que un verdadero Genocidio Político y ustedes, sus firmantes, sus verdaderos responsables.

Si los saharauis aguantáis, aguantaremos con vosotros y vosotras. No os abandonaremos