N agore, en tu ausencia y por tu ausencia seguimos aquí para darte una vez más la voz y la palabra que Jose Diego Illanes te quitó hace 15 años intentando ocultarla para siempre. Exigiendo una vez más justicia reparadora y no patriarcal. Recordando que fue un asesinato.

Recordando a todas las asesinadas por violencias machistas en 2023. Apoyando a quienes la sufren denuncien o no. Un año muy duro con 53 feminicidios de enero a junio, entre ellos un menor (violencia vicaria). Un año donde estamos viendo cómo quienes niegan la violencia machista, incluida la sexual, están ocupando espacios de poder, incluso concejalías de Igualdad, exigiendo que no se dé ni un duro a los recursos y actividades de igualdad y asegurando que los asesinatos, machistas son solo “separaciones duras”.

Recordando que a todas ellas las han asesinado, golpeado, violado, acosado o maltratado por el mero hecho de ser mujeres o personas que rompen con la norma heteropatriarcal. Es decir, por tener una consideración de objeto, de algo menor-inferior, propiedad particular que no tiene derecho a decir ni decidir sobre su cuerpo y su vida.

Esta violencia contra las mujeres y hacia todas las personas que se salen de la norma es el cruel y trágico reflejo de una enfermedad que nos destruye como sociedad. Una sociedad hetero-patriarcal, racista y capitalista que no deja crecer libremente a las personas, independientemente de que sean mujeres u hombres o lo que deseen o sientan. Para acabar con ella, solo existe una vacuna, un solo camino: la igualdad y el feminismo.

En estos 15 años, reconocemos avances y cambios importantes en todo el Estado y en Navarra en materia de violencia machista, gracias al inmenso trabajo del movimiento feminista. Ahora en julio de 2023 creemos que se deben de seguir revisando los protocolos de actuación ante las violencias machistas, que se desarrolle, aplique y amplíe la ley de libertad sexual. No se trata solo de consentir. ¡Se trata de desear!

Y la creación del centro de atención integral 24 horas a la violencia sexual en Navarra, que debería de llamarse Nagore Laffage.

Día sí y día también nos despertamos, estremecemos, indignamos y enfadamos con algún dato relacionado con la violencia sexual, versus violencia machista hacía las mujeres. Son de todas las edades, en todos los lugares y cada vez más violaciones en grupo o con componentes más duros, con crueldad extrema donde se busca demostrar el ejercicio de poder sobre el cuerpo de las mujeres y la cosificación de los mismos.

Nos consideran un mero objeto, algo menor-inferior, propiedad particular que no tiene derecho a decir ni decidir sobre su vida y su cuerpo. Como dice Rita Segato: “La violación no es un acto sexual, es un acto de poder, de dominación, es un acto político”.

El feminismo y la sociedad navarra lleva 15 años diciendo en las calles y en todos los lugares que no queremos un sexo encorsetado en las fronteras patriarcales. Pretende que los hombres sean incapaces de imaginar otro sexo que no sea el de la mujer complaciente a la que le gusta exactamente lo mismo que a ellos. Y que vean jolgorio y diversión en una violación. Que nos niega a nosotras como sujetos sexuales, pensantes y sintientes y sobre todo deseantes. Que tenemos un deseo propio y queremos un placer propio.

Estamos hartas de que a una mitad le toca el placer, y a la otra complacer. De que nuestro cuerpo sea mirado como un contenedor. Porque solo el sí es sí.

Hemos denunciado la desprotección legal ante la violencia sexual. Hemos pedido la ley de “Solo el Sí es Sí” para que se trabaje de manera integral, desde la justicia, pero sobre todo desde la educación afectivo sexual y feminista. Con medidas diversas e integrales, incluida la autodefensa feminista y el trabajo con chicos, la coordinación de recursos y protocolos en los que se dé la voz y reconocimiento al movimiento feminista.

Queremos volver a recordar que nuestro objetivo principal, además de acabar con el sistema heteropatriarcal, es que ninguna mujer se sienta sola, siendo atendida en todo lo que necesite, respetando su derecho a la intimidad y decisiones. El derecho de las mujeres a decidir y poder decir que no. El derecho a disfrutar en igualdad de todos los espacios y ámbitos de la vida, incluidos las fiestas, la calle y la noche. Por eso, ahora, en Navarra, después de 15 años insistiendo, se va a abrir con fondos europeos el Centro de Crisis Contra la Violencia Sexual con atención integral las 24 horas.

Han sido 15 años junto a tu madre, Asun, embajadora de Lunes Lilas Navarra en todos los platos del mundo. Con Javier, tu hermano, y con la dolorosa pérdida de Txomin Laffage. Con las gentes de Irún y toda tu familia Nagore, a quienes agradecemos su constancia y valentía. Han estado contra viento y marea. No os podemos devolver a Nagore, pero sí seguir apoyándoos, difundiendo su voz y recordaros que para la mayoría de la ciudadanía de Iruña Nagore fue asesinada. Pedimos justicia y reparación. Ni un paso atrás en las políticas públicas de igualdad. No te olvidamos. Y contigo al resto. Porque no queremos que tu memoria y la de ninguna sea borrada e ignorada. Nunca más a ninguna otra mujer.

Y en este camino, este lunes 3 de julio en Plaza del Vínculo, nos han acompañado grupos feministas, las peñas y otros colectivos que una vez más demuestran su compromiso con una vida libre para todas las personas. También las instituciones y los medios de comunicación.

¡Felices fiestas 2023! Estos Sanfermines, a disfrutar a tope (cada cual como le guste), pero siempre en base a unas relaciones libres de agresiones sexistas, homófobas o racistas.

*Técnica de Igualdad y miembro de Lunes Lilas Navarra