ice Cecilia Gato Fernández que todos sus psicoanalistas coinciden en señalar que poder dibujar y escribir es lo que le salvó de la locura o del suicidio. En el cómic La sombra de la cucaracha, en el que vuelca su experiencia como niña abusada por su padre, y que acaba de llegar al Estado tras el terremoto que ha desatado en su Argentina natal, el arte se nos revela una vez más como refugio y canalizador del sufrimiento. Gato Fernández también cuenta que trata de no hablar demasiado en serio de la depresión crónica que padece, y vuelca en su obra las "cosas terribles" que piensa sobre sí misma y el mundo que le rodea. El arte creativo y su incansable búsqueda del sentido último de la vida. "Siempre he sabido que algo no funcionaba bien dentro de mi cabeza", comienza escribiendo en su último libro (El peligro de estar cuerda) la escritora y periodista Rosa Montero. Mentes creativas que se percibieron distintas e incluso inadecuadas desde niñas, como la propia Frida Kahlo, y que han sabido transformar el dolor en expresión artística, después de transitar por ese tenebroso territorio interior que solemos llamar locura. Artistas que intentan acallar al yo consciente, que es el mayor enemigo de la creatividad, esa vocecita que te susurra venenosas palabras: "No vales, no lo vas a conseguir, ríndete de una vez a la adversidad". l