Síguenos en redes sociales:

La incineración en Dinamarca

Cartas a la Dirección

hACE pocos días, en un escrito enviado a esta sección, S.G.A. mostraba su oposición a la incineración de las basuras por los problemas que generan sus residuos, según su experiencia personal en Dinamarca.

Analizando la realidad del tratamiento de las basuras en Europa, Eurostat nos asegura que en Dinamarca se trata el 50% del total de sus basuras, con el reciclaje y el compostaje y, se incinera el otro 50% de la basura resto. Para conseguirlo, actualmente funcionan en Dinamarca 29 incineradoras y, otras 10 incineradoras están en proyecto o en construcción; por lo tanto, hoy en día hay una incineradora por cada 190.000 daneses y muchas de ellas están ubicadas en zonas urbanas como en París, Lyon, Bonn, Zurich, Hamburgo, Frankfurt, Viena etc. Al fin y al cabo, una incineradora , según define el CIEMAT, es una instalación de combustión controlada para residuos.

Los daneses, que son una sociedad adelantada, concienciada con el medio ambiente, responsable, muy informada y defensora radical de sus derechos individuales y colectivos, optaron hace muchos años por la incineración, decisión que valoro muy positivamente. Y es que su implantación ha permitido demostrar que la incineración controlada y bien desarrollada no crea ningún problema social ni sanitario perceptible y, prueba de ello, es la aceptación sin oposición de las nuevas incineradoras. Si un pueblo como el danés, serio, muy exigente con su salud y muy comprometido con la sostenibilidad medioambiental, tras varias décadas de funcionamiento acepta la incineración con todos sus problemas, incluidos los residuos, a mi entender le hace ser una opción muy fiable y segura en el tratamiento de la basura resto.

Actualmente en Europa, según el Eurostat, a pesar del incremento del reciclaje y del compostaje, se dejan sin reutilizar más del 50% del total de las basuras; para tratar esta gran cantidad de basura resto en la actualidad solo hay dos opciones reales, el vertedero, como Grecia e Irlanda, o la incineración, como Dinamarca y Suecia.

Los daneses optaron por la incineración para conseguir el vertedero cero, y desarrollando una tecnología punta de última generación, adecuada a sus necesidades y a sus posibilidades económicas, han conseguido que su opción sea aceptada y validada por la mayoría de su población.

Aprendamos de países como Dinamarca, que tienen el problema bien resuelto; respetemos a las instituciones europeas que han catalogado a la incineradora como una instalación de aprovechamiento energético; recordemos que con más reciclaje, más compostaje y más incineración se necesitan menos vertederos y así conseguiremos, como europeos que somos, cumplir el objetivo de la UE de vertedero cero en el año 2020; lo que los daneses prácticamente ya han conseguido.

José Olano