Donostia – La declaración conjunta firmada este pasado viernes en la Casa Blanca por los líderes de Armenia y Azerbaiyán representa una victoria estratégica para Estados Unidos, que se hace con los derechos para el desarrollo de un corredor estratégico que enlazará Azerbaiyán con su exclave de Najicheván a través del sur de Armenia.
Esta ruta recibe el nombre histórico del corredor de Zangezur pero el acuerdo del viernes entre el primer ministro armenio, Nikol Pashinián, y el presidente azerí, Ilham Aliyev, estampa el nombre del anfitrión de su encuentro: la Ruta Trump para la Paz y la Prosperidad Internacional (TRIPP, por sus siglas en inglés).
El texto completo del acuerdo se hará público mañana lunes, pero la declaración conjunta del viernes estipula como condición inapelable del acuerdo de paz entre Armenia y Azerbaiyán la consecución de “la conectividad sin obstáculos entre la mayor parte de la República de Azerbaiyán y la República Autónoma de Najicheván a través del territorio de la República de Armenia” a través de este corredor.
43 km
Horas antes de la firma, la Casa Blanca confirmaba que el acuerdo concedía a Estados Unidos los “derechos exclusivos para el desarrollo” de esta ruta de 43 kilómetros a través de la región armenia de Syunik, que enlazará además con Turquía, fortaleciendo la posición azerí como uno de los epicentros comerciales de la región del Cáucaso Sur.
Sin entrar en detalles, Trump avanzó que EEUU podría quedarse con los derechos durante los próximos 99 años.
Irán podría ser uno de los grandes perjudicados por un acuerdo que representa un obstáculo para el acceso natural de la república islámica al Cáucaso Sur vía Armenia.
Rusia tampoco se verá beneficiada por el acuerdo. Es más, el subdirector de la Comisión de Asuntos de la Comunidad de Estados Internacionales del Parlamento Ruso, Konstantin Zatulin, manifestó al diario ruso Lenta que el pacto “significa simultáneamente la expulsión de Rusia del Cáucaso y la llegada de Estados Unidos”.
El único puesto estratégico que le queda a Rusia en la región es una base militar en Armenia, y ahora ésta “pende de un hilo”, añadió Zatulin.
Reacciones
España
Paz definitiva. Exteriores mostró su confianza de que el pacto suponga “un paso decisivo hacia la paz definitiva y la normalización completa de las relaciones entre Armenia y Azerbaiyán tras décadas de conflicto”.
Francia
Avance clave. El Elíseo considero “un avance determinante” el acuerdo y pidió su firma y ratificación “lo antes posible” para “finiquitar el proceso”.
R. Unido
Valentía. Londres apeló a la “valentía” de ambos países y se comprometió a apoyar la paz en el Cáucaso Sur, siempre que ambas partes “cumplan con sus compromisos”.
“La participación de actores extrarregionales debe contribuir al fortalecimiento de la agenda de paz y no a la creación de dificultades adicionales ni divisiones”, dijo, por su parte, la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova, quien apostó por la participación de los “vecinos inmediatos de ambos países, como Rusia, Irán o Turquía” como la “la mejor opción” para resolver los problemas del Cáucaso Sur.
Conexión ferroviaria
El primer ministro armenio estima, por contra, que este acuerdo no tiene por qué ser necesariamente nocivo para Moscú. “Este proyecto concede a Armenia una conexión ferroviaria con Rusia, algo que no hemos tenido en 30 años, bien con el impulso de la ruta Trump o sin ella”, aseguró.
“No olvidemos que los ferrocarriles de Armenia están bajo control ruso y, quizás, Rusia esté interesada en invertir para restaurar los ferrocarriles Ijevan-Hrazdan e Ijevan-Kazajstán. Por supuesto, también se necesitaría el consentimiento de Azerbaiyán en este caso”, explicó .
Por lo demás, y a falta del texto completo, el acuerdo rubricado el viernes ante el presidente Donald Trump también disuelve oficialmente el Grupo de Minsk de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), encargado de mediar para una solución del histórico conflicto de Nagorno-Karabaj, epicentro de las tensiones entre ambos países y estipula el levantamiento estadounidense de las restricciones impuestas en Estados Unidos en 1992 a la cooperación militar con Azerbaiyán.