Seis palestinos han muerto este miércoles y más de setenta resultaron heridos por disparos del Ejército israelí durante una intervención militar en la ciudad de Nablus, en el norte de Cisjordania ocupada, en medio de un repunte de violencia que ha causado ya más de 60 muertos en 2023.

El Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) confirmó la muerte de los seis palestinos -entre los que hay un anciano de 72 años- y aseguró que entre los heridos hay al menos seis en estado de gravedad.

Según la agencia oficial de noticias palestina Wafa, dos de los heridos eran periodistas que estaban cubriendo la redada.

La Yihad Islámica Palestina, una organización considerada terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea, identificó a uno de los muertos, Muhamad Jaled Anbousi, de 25 años, como uno de sus miembros.

Mohamed Shtayeh, primer ministro de la ANP, describió la operación militar como "terrorismo organizado" y denunció que Israel busca trasladar su crisis política interna al conflicto con los palestinos.

Los incidentes de este miércoles son "un crimen por parte de las fuerzas de ocupación (israelíes)", indicó por su parte un portavoz de la oficina del presidente de la ANP, Mahmud Abás.

Acusando a Israel de "empujar a la región hacia una situación explosiva", instó al Gobierno de Estados Unidos a actuar de inmediato y "presionar a Israel para que detenga sus crímenes y agresiones contra el pueblo palestino", indicó el portavoz Nabil Abu Rudeineh.

Duros enfrentamientos

Un gran número de soldados israelíes irrumpieron en la ciudad vieja de Nablus y rodearon una vivienda, lo que provocó lugar a fuertes enfrentamientos entre palestinos armados y uniformados, que lanzaron gases lacrimógenos y granadas aturdidoras contra residencias familiares y comercios, según Wafa.

El Ejército israelí, por su parte, no ofreció información sobre el operativo y se limitó a confirmar que sus tropas estaban en la ciudad de Nablus.

Los enfrentamientos de este miércoles se producen en medio de una fuerte escalada de violencia en el marco del conflicto palestino-israelí, que ya ocasionó 55 palestinos muertos y 11 del lado israelí en lo que va de 2023.

Buena parte de estos fallecimientos se produjeron durante enfrentamientos armados desencadenados por redadas militares israelíes en Cisjordania ocupada, así como en ataques mortales cometidos por palestinos contra israelíes.

Intervenciones como las de este miércoles se han hecho casi cotidianas desde finales de marzo del año pasado, cuando Israel lanzó su operación "Romper la ola" como respuesta a una serie de ataques mortales por parte de palestinos o árabes israelíes.

El foco más frecuente de estas operaciones es el norte de Cisjordania, sobre todo las ciudades de Nablus y Yenín, que albergan a importantes grupos armados locales, responsables de varios ataques contra israelíes.